El Sporting de Gijón aduce que la ruptura del fichaje del mediapunta del Real Zaragoza Sergio Bermejo se debe al temor del área médica del club asturiano "por un problema físico observado a posteriori de las pruebas que pasó el jugador que puede acabar en lesión".

No comparte el club gijonés la información publicada en HERALDO DE ARAGÓN en la que se reseña que, con ese preludio del temor a una lesión al que se refiere la entidad norteña, el Sporting comunicó a Bermejo una oferta económica diferente, a la baja, respecto de los términos pactados entre las partes horas antes, motivo por el que el futbolista rehusó la operación y esta se vino abajo sin remedio.

Resulta singular que el Sporting admite que "Bermejo pasó el reconocimiento médico sin problemas" en la mañana del lunes en una clínica de la ciudad gijonesa. Es decir, que en esa batería habitual de pruebas en profundidad que sirven de test decisivo para admitir el fichaje de un futbolista nuevo, los médicos dieron en visto bueno. Cuando esto sucedió, era media mañana. 

Tanto es así que Bermejo fue ataviado con su nuevo uniforme del Sporting de Gijón, escudo de la entidad en el pecho, y subió en el autobús oficial del club para viajar hasta Mondariz (Galicia), donde desde la tarde del lunes daba comienzo la concentración de pretemporada de los de El Molinón. Y ahí, Bermejo era ya uno más de la plantilla de Rubén Albés, el nuevo entrenador en la plaza, que lo conocía de su época inicial como jugador en el Celta B, razón por la que precisamente se intensificó en su momento el interés del Sporting por fichar al jugador zaragocista. El fichaje de Bermejo, a falta de la oficialidad, era la noticia del día en Gijón y entre el sportinguismo, como es natural en estos casos. 

No solo viajó Bermejo a Mondariz sino que en esas horas vespertinas se entrenó en el gimnasio. Cierto es que sonó raro que no participara de los ejercicios sobre el césped con el resto del grupo, pero se entrenó. 

Fue llegada la noche cuando explotó el caso. El Sporting asegura que solo le informó (y al Real Zaragoza a la vez) de ese "problema médico que advierte de riesgo de lesión en el futuro" y que por eso no se hacía el traspaso finalmente. Otras fuentes bien informadas añaden lo publicado en HERALDO: el Sporting sí que mostró su intención de seguir cerrando la operación y firmar a Bermejo, pero con unos emolumentos inferiores a los pactados, en una modificación hecha 'in extremis' y ya con el futbolista presente en el seno del equipo sportinguista desde un buen número de horas antes, socializando con los que iban a ser sus nuevos compañeros, con habitación asignada y con el proceso de aclimatación a su nuevo destino en marcha. 

El Sporting indica que "en todo momento se ha tratado el asunto con el máximo respeto para con el jugador y con el Real Zaragoza, tratando de no  hacer daño por la decisión adoptada". Es evidente que el devenir de los acontecimientos no ha conseguido ese objetivo, si ese era el fin como señalan.

Queda ahora por saber si este polémico (inevitablemente ya) caso se queda varado en este punto o si, por el contrario, el Real Zaragoza o el propio Bermejo tienen la necesidad y la voluntad de aclararlo poniéndole luz al asunto. 

El Sporting ficha a Dubasin escasas horas después

En el Real Zaragoza se observa con atención todo lo acontecido desde la jornada del lunes hasta el inicio de este martes alrededor del caso Bermejo. Y se incluye en el guion de la película el fichaje por parte del Sporting de Gijón del mediapunta hispano-belga Jonathan Dubasin, que se dio conocer hace dos años en el Albacete y, por ende, está directamente vinculado con el entrenador del Sporting, Rubén Albés. 

Dubasin, que el año pasado jugo la segunda parte de la temporada cedido por el Basilea suizo en el Real Oviedo, ha sido finalmente el futbolista del perfil que ocupa Bermejo en el campo que ha elegido el Sporting para reforzar esa parcela atacante. Su contratación por los de Gijón ha llegado escasas horas después de haber roto la operación con el Real Zaragoza por Bermejo.