Claudia Sheinbaum, primera mujer presidenta de México: "No llego sola, llegamos todas"

La primera mujer presidenta en 203 años de historia de México arrasa en las elecciones celebradas el domingo tras sacar más del doble de votos a su principal adversaria, Xóchitl Gálvez.

La candidata oficialista a la presidencia de México, Claudia Sheinbaum, primera mujer presidenta de México
La candidata oficialista a la presidencia de México, Claudia Sheinbaum, primera mujer presidenta de México
Alexandre Meneghini

Claudia Sheinbaum, la primera mujer presidenta en 203 años de historia de México, arrasó en las elecciones celebradas el domingo. Sacó más del doble de votos a su principal adversaria, Xóchitl Gálvez, y casi sextuplicó los recibidos por el tercer candidato en liza, Jorge Álvarez Máynez. Sumó varios millones más de votos que el actual presidente, Andrés Manuel López Obrador, en 2018, su padrino político, y alcanzó el 59% de los votos emitidos por el 60% del electorado.

"No llego sola, llegamos todas. Con las heroínas que nos dieron patria, nuestras ancestras, nuestras madres, nuestras hijas y nuestras nietas", dijo Sheinbaum el domingo por la noche pocos minutos después de que el Instituto Nacional Electoral anunciara su triunfo tras un conteo rápido, realizado en unos 5.600 colegios electorales de los 170.000 que había desplegados por un país con casi 100 millones de votantes.

Tras varias horas de tensión y algunos comentarios mal intencionados por responsables de los partidos de oposición, Xóchitl Gálvez, la candidata perdedora, la llamó para felicitarla antes de que saliera a celebrar su triunfo a la Plaza de la Constitución, más conocida por el Zocalo, el pulmón de la capital mexicana, y una de las plazas más grandes del mundo. "Ahora es momento de dejar atrás el encono de la campaña", reconoció Gálvez, que había puesto en duda la victoria de su rival antes de conocerse los resultados del conteo rápido en su cuenta de X (Twitter).

Decenas de miles de simpatizantes la recibieron con gritos de "presidenta, presidenta". Sheinbaum, a la que le cuesta mostrar sus sentimientos en público, también celebró la consecución de una mayoría que podría ser absoluta tanto en el Congreso de los Diputados como en el Senado, con la que no pudo contar el presidente saliente durante el sexenio que ha regido los destinos de México.

López Obrador mostró su alegría en X por el triunfo de la candidata de su partido: "Hoy es un día de gloria porque el pueblo de México decidió libre y democráticamente que Claudia Sheinbaum se convierta en la primera mujer presidenta en 200 años de vida independiente de nuestra República. Felicidades a todas y todos los que tenemos la dicha de vivir en estos tiempos estelares de orgullo y transformación".

Las encuestas no se equivocaron en México. Desde prácticamente el inicio de la campaña electoral, que duró tres meses, siempre le dieron una abultada ventaja aún mayor a medida que el conteo de votos oficiales fue avanzando durante toda la noche del domingo y la mañana del lunes.

Sheinbaum, de 61 años, se ha beneficiado de la alta popularidad del actual presidente López Obrador, y se ha comprometido a continuar su legado con "sello propio". A los 15 años se involucró con el movimiento de madres que buscaban a sus hijos desaparecidos, dirigido por Rosario Ibarra, una reconocida activista de derechos humanos y política izquierdista, la primera mujer en presentarse a unas elecciones presidenciales en México en 1982.

Graduada en Ingeniería Ambiental, obtuvo su doctorado en Ingeniería Energética por la Universidad Nacional Autónoma de México y la universidad californiana de Berkeley. Gran parte de su vida profesional la ha dedicado a la enseñanza universitaria y se especializó en energías renovables y cambio climático.

En el año 2007, el Panel Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático, en el que estaba integrada Sheinbaum junto a otros 600 académicos e investigadores, recibió el Premio Nobel como organización.

Sheinbaum empezó a relacionarse con Lopez Obrador tras su llegada al gobierno de Ciudad de México, a partir de 2000. La candidata electa fue elegida como secretaria de Medio Ambiente por un periodo de seis años. Fue la portavoz de la campaña electoral de Lopez Obrador en 2006, cuando perdió las elecciones presidenciales por un margen estrecho y fuertes acusaciones de fraude contra su contrincante Felipe Calderón.

En 2018 se convirtió en la jefa del gobierno de Ciudad de México con el 47% de los votos, 16 puntos más que su principal opositor mientras su mentor era elegido presidente de la República de México con el 53% de los votos.

A principios de marzo, cuando empezó la campaña electoral, presentó su proyecto político de cien puntos en el que sobresalían cinco propuestas clave en su campaña. En educación, su objetivo es conseguir la gratuidad universal para todos los niveles educativos, y fortalecerlo con un sistema de becas para estudiantes de preescolar, primaria y secundaria.

Europa Press

Otro de los puntos clave es la seguridad. Los índices de violencia se han disparado en el último sexenio con decenas de miles de asesinatos anuales. Quiere reforzar la Guardia Nacional, creada por decreto en marzo de 2019, como parte de la estrategia para combatir la delincuencia organizada en el país.

Durante la presidencia del López Obrador, iniciada hace seis años, se han alcanzado records históricos. Más de 180.000 personas han sido asesinadas en el país, según datos oficiales y otras 36.000 han desaparecido. En 2021, se registró una tasa de 28 homicidios por cada 100.000 personas. El mes de abril de este año se han convertido en el más violento con 2.349 asesinatos, una media de 78 crímenes diarios.

La cifra de asesinatos supera con creces los 150.000 del gobierno entre 2012 y 2018 de Enrique Peña Nieto y los 122.000 del gobierno entre 2006 y el 2012 de Felipe Calderón, cifras que ya duplicaron las producidas durante gobiernos anteriores.

Más de 5.000 de estas muertes fueron catalogadas como feminicidos. Sheibaum se ha comprometido a tipificar como feminicidio a nivel nacional todos los asesinatos de mujeres y a perseguirlos judicialmente.

Aunque México tiene una de las legislaciones judiciales más duras contra los responsables de asesinatos por violencia de género, la impunidad permite que un gran porcentaje de los crímenes no sean juzgados.

La futura presidenta, cuya legislatura empezará el 1 de octubre, también se comprometió con un plan nacional, administrado por la Secretaría de Salud, que permita coordinar los servicios públicos de salud en todo el país, y también propuso una redistribución social del presupuesto para garantizar que los programas sociales lleguen a quienes más los necesitan.

Uno de los problemas más graves que sufre el país, y muy especialmente la capital, son los permanentes recortes de agua por culpa de la sequía y una mala utilización de los excedentes. La idea de la futura presidenta es fortalecer la Comisión Nacional del Agua para que regule mejor la explotación, el uso y el control aguas y permita que todos los ciudadanos tengan acceso a un derecho humano fundamental.

La presidenta electa tendrá que negociar con Estados Unidos sobre el flujo de migrantes que cruzan México y la cooperación en materia de narcotráfico, después de que un reciente informe de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) señalase que los carteles mexicanos son los responsables de la "más peligrosa y mortal crisis de drogas que Estados Unidos haya enfrentado" por el tráfico de fentanilo y las anfetaminas, que mató en los primeros seis meses de 2023 a 38.000 personas en Estados Unidos. Otras 30.000 personas murieron por sobredosis de cocaína. Esas negociaciones podrían ser más complicadas si Donald Trump gana la elección presidencial en noviembre.

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