Se esperaba con curiosidad el primer entrenamiento de esta tercera semana de pretemporada del Real Zaragoza para observar qué portero canterano acudía a apoyar el trabajo a tercias de los guardametas del primer equipo, bajo la tutela de Mikel Insausti. La marcha de Rebollo, deseada y necesaria en el plan de remodelación de la plantilla, oficializada el domingo por la tarde rumbo al Gimnástic de Tarragona, dejaba solos a Femenías, uno de los fichajes del verano, y a Poussin, cancerbero que también debe y va a salir del plantel irrevocablemente. 

Con el capitán y titular de las últimas siete temporadas, Cristian Álvarez, aún convaleciente de su última lesión muscular, la acontecida en mayo, existe la certeza de que falta un fichaje todavía en esa posición, que es la más específica y, probablemente, la más importante en el diseño de una plantilla en cualquier categoría. Los porteros son los únicos grandes especialistas en la práctica de un deporte como el fútbol. Claves, decisivos, fundamentales. 

Este año, de entrada y al contrario que en pretemporadas anteriores, Víctor Fernández no ha contado con porteros del filial, del RZD Aragón. De hecho, solo podría haberlo concebido con uno, Acín, pues el otro, Calavia, está lesionado y se recupera de una operación quirúrgica, circunstancia que va a lastrar buena parte de su precampaña con el B. 

Emilio Larraz, el entrenador del segundo equipo blanquillo, empezó los trabajos veraniegos la semana pasada con dos porteros que la entidad ha tenido cedidos el año último, Nico Rodríguez (en el Teruel) y De Cea (en el Cartagena-Mar Menor). En la pasada liga, los dos guardametas del equipo juvenil A, Espuña y Berrar, llegaron a tener minutos en días de necesidad en Segunda RFEF. 

Sin embargo, el elegido para este primer día de trabajo de la semana por parte de Víctor Fernández y del club para apoyar al primer equipo tras el adiós de Rebollo ha sido Lucas Olmos, el portero del juvenil B del curso precedente. 

Es decir, el trío de guardametas que está metido en faena a 22 de julio en la plantilla de Segunda División es Femenías, Poussin y Olmos. Falta una pieza de máximo rango en el puzle de Juan Carlos Cordero, el director deportivo que, a destajo, está encabezando las decenas y decenas de negociaciones por fichajes y salidas que tiene este verano en marcha el Real Zaragoza.