Zaragoza

La muerte de la niña ahogada en Ateca, asesinato u homicidio imprudente

La bebé de 14 meses estuvo sumergida en el agua una hora y los informes forenses no descartan que el fallecimiento fuese intencionado.

Concentración en la plaza de España de Ateca por el fallecimiento de la menor
Jorge Zorraquín

Los informes forenses descartan que el fallecimiento de la niña de 14 meses ahogada el miércoles de la semana pasada en la piscina de su casa de Ateca se debiese a un descuido momentáneo de sus padres. Las lesiones que presentaba el cuerpo de la bebé hacen que los investigadores consideren que tuvo la cabeza sumergida durante más de una hora después de que su flotador volcase y, de hecho, no descartan que la muerte fuese intencional por sofocación. Al respecto, y a la espera de la autopsia definitiva y de los pasos que de la investigación judicial, la jueza encargada de la instrucción, la titular del Juzgado Mixto número 2 de Calatayud, dictó el viernes pasado prisión provisional para los dos progenitores como posibles autores “de un delito de asesinato u homicidio imprudente de menor de edad”.

En los autos de entrada en la cárcel, la jueza considera “absolutamente incomprensible que los progenitores desampararan sin vigilancia durante horas a una bebé de tan solo 14 meses de edad dentro de una piscina”. “Cualquier ciudadano de inteligencia media, sin necesidad de especiales disquisiciones intelectuales, es conocedor de que un menor de esa edad requiere supervisión constante por parte de un adulto”, añade. También habla de “absoluta dejadez de los detenidos en sus funciones paternofiliales”.

En el atestado elaborado por la Guardia Civil se indica que los progenitores -de 37 años el padre y de 35 años la madre- no llamaron a ningún servicio sanitario de emergencias y que tampoco solicitaron algún tipo de auxilio. Incluso rechazaron ayuda. Un hombre, que ha sido citado para declarar en septiembre como testigo, se cruzó con el padre cuando éste salía de la casa con la bebé en brazos y a la vista de la situación se ofreció a llevarlos en coche hasta el centro de salud. Sin embargo, a pesar de los 400 metros de distancia, prefirió ir andando. Ya en él, la niña entró en situación de parada respiratoria y, aunque el personal médico intentó reanimarla, las maniobras no dieron resultado.

Además de la bebé fallecida, el matrimonio de origen marroquí tiene tres hijos más de 3, 10 y 13 años de edad que han quedado al cuidado de familiares. Habían llegado a Ateca desde Mallorca hace menos de un año y se habían instalado en una casa de la calle de San Miguel.

En la localidad zaragozana la noticia causó una gran conmoción. Se declaró tres días de luto oficial y el pasado jueves en la plaza de España se llevó a cabo un minuto de silencio al que acudieron unas 200 personas que quisieron así transmitir el pésame a la familia.