Zaragoza

La polémica por las Zonas Jóvenes enciende el pleno de Zaragoza con gritos de “sinvergüenza” y “dimisión”

PP y Vox han tratado de defender el nuevo modelo, insistiendo en que no va a haber recortes.

Protesta de los asistentes al pleno del Ayuntamiento de Zaragoza, este jueves
Heraldo

La polémica por las Zonas Jóvenes Escolares y el futuro de casas de juventud como las del barrio Oliver ha alcanzado este jueves nuevas cotas en el Ayuntamiento de Zaragoza. La tensión se ha disparado en un salón de plenos abarrotado en el que se han escuchado gritos pidiendo la dimisión de la concejala delegada de Juventud, Ruth Bravo, e insultos contra los representantes de Vox.

Bravo ha tratado de defender que las políticas “se van a potenciar” y que lo único que se persigue es aplicar criterios de eficacia y eficiencia a unos programas que vienen de los años 90. Lo ha hecho en una intervención en la que la alcaldesa, Natalia Chueca, ha tenido que pedir silencio en repetidas ocasiones a los asistentes. “La gestión no puede ser la misma que entonces”, ha argumentado la edil entre gritos que la acusaban de “no conocer los programas”.

Según ha remarcado, para el equipo de gobierno “la integración no consiste en construir guetos ni mantenerlos”, sino que se trata de “dar oportunidades reales”. A este respecto, ha subrayado que las casas de juventud “no se van a mover de los barrios” y que en las zonas jóvenes “no va a haber recortes económicos”.

La izquierda, sin embargo, cree que los nuevos pliegos de las Zonas Jóvenes “infravaloran las funciones de los trabajadores y precarizan sus condiciones laborales”. Pese a que habían sido retirados del proceso de licitación, el Ayuntamiento ha aprobado este jueves una versión del documento en gobierno. “Han vuelto a presentarlos con agosticidad. Creíamos que tras el error o la chapuza anterior tendríamos una oportunidad, pero no ha habido opción”, ha lamentado el concejal socialista Francisco Galán.

El problema, ha agregado el edil de ZEC Suso Domínguez, es que “ya están llegando noticias de Peñaflor, El Arrabal o Casablanca”, cuyas casas de juventud podrían correr la misma suerte que la del barrio Oliver. Todo esto le ha llevado a volver a solicitar la retirada de los pliegos.

En la nueva versión, ha completado Galán, apenas se han cambiado dos apartados en los que se hacía alusión a la violencia de género, el machismo o la ‘lgtbifobia’, de ahí que desde la izquierda hayan continuado cargando contra lo que consideran un “recorte ideológico” promovido por Vox.

La formación de extrema derecha, en cambio, ha mantenido sus críticas a lo que considera “basura ideológica”, palabras que le han costado al concejal Armando Martínez gritos de “sinvergüenza”.

La polémica también ha llevado a tomar la palabra a la FABZ, los vecinos de Parque Goya y UGT, que han cargado contra el “menoscabo” a los recursos sociales de la ciudad. “Reducen las jornadas y la dotación económica. Poco a poco quieren cerrar las zonas jóvenes de los barrios. ¿Qué clase de mejora implica cerrar centros y despedir trabajadores? Estamos de acuerdo en que hace falta una reformulación, pero no así. Se quiere mercantilizar el ocio”, han dicho.