Solo el 30% de los ascensores de Zaragoza cumplen la nueva normativa, ¿por qué?
El Colegio de Administradores de Fincas de Aragón estima que únicamente los elevadores de la obra nueva no tendrán que sufrir ningún cambio con la ley que entra en vigor el 1 de julio.
![Edificio de viviendas en el número 13 de la calle Peña Oroel en Zaragoza, en la que se ha instalado un ascensor exterior. Autor: JIMÉNEZ, FRANCISCO Fecha: 31/03/2023 Propietario: Colaboradores Aragón Id: 2023-983714 [[[HA ARCHIVO]]]](https://imagenes.heraldo.es/files/image_990_556/uploads/imagenes/2024/06/25/edificio-de-viviendas-en-el-numero-13-de-la-calle-pena-oroel-en-zaragoza-en-la-que-se-ha-instalado-un-ascensor-exterior-autor-jimenez-francisco-fecha-31-03-2023-propietario-colaboradores-aragon-id-2023-98371.jpeg)
Comunidades de propietarios, preparen sus derramas. A partir del próximo lunes, 1 de julio, entra en vigor la nueva normativa de ascensores, la cual solo cumplen en torno a un 30% en Zaragoza, según estima el Colegio de Administradores de Fincas de Aragón. En mayor o menor medida, los bloques de viviendas más antiguos deberán hacer frente a algún tipo de inversión para adecuar sus elevadores, aunque con un plazo "más que razonable".
La Instrucción Técnica Complementaria (ITC) es una medida implementada para aumentar la seguridad en los ascensores ya existentes. Para alcanzar los mínimos que exige, se evalúan varios conceptos. No obstante, en 2017 ya se actualizó la normativa, de forma que todos los elevadores instalados a partir de ese año la cumplen, por lo que los de la obra nueva quedarán exentos. No obstante, en Zaragoza, el Colegio de Administradores estima que un 10% van a estar "muy afectados", en palabras de Beatriz González, miembro de la Junta de Gobierno. Esto significa que incluso deberán cambiar el aparato, algo que requiere un gran desembolso por parte de la comunidad.
Son varios aspectos los que hay que tener en cuenta. Por ejemplo, todos los ascensores deben lograr una precisión de parada de unos 10 mm y una nivelación de 20 mm para evitar tropiezos; sistemas de detección y protección para minimizar accidentes por cierre de puertas; actualizar las guías y contrapesos; entre otros aspectos más técnicos. Algunas de estas renovaciones, las más básicas, pueden costar entre 1.000 y 5.000 euros, según explica González, siempre que haya una obra de por medio. "No es que sea poco, pero es algo que en 2005 también ocurrió cuando se actualizó la normativa. Son adaptaciones que pueden hacerse con alguna derrama", comenta.
Estima que el 50% o 60% de los ascensores de Zaragoza incumplirán cuestiones "menores" de la nueva normativa. "Les puede faltar el pesacargas, o el control luminiscente que te garantiza que no se va a cerrar la puerta, la comunicación bidireccional... Son temas importantes para la seguridad, pero no son afecciones graves", comenta la administradora de fincas.
El problema viene para aquellas comunidades de propietarios que deberán cambiar por completo el elevador, que serían otro 10%. "Los más afectados son los que se colocaron antes del 67. No obstante, para reemplazarlos se da un plazo muy razonable para poder hacer frente a los pagos", indica González. Un cambio completo por uno nuevo puede llegar a costar entre 30.000 y 40.000 euros, dice. "Solo en barrios nuevos como Valdespartera o Parque Goya no se llevarán a cabo este tipo de actuaciones. Incluso el Actur, que es joven, tiene casas construidas hace muchos años", puntualiza. Lo cierto es que el parque de edificios de la capital aragonesa es muy antiguo y, aunque algunos elevadores hayan sido actualizados, necesitarán otra puesta a punto.
La normativa engloba tanto edificios destinados a pisos como a oficinas, además de otro tipo de infraestructuras públicas. Aunque entrará en vigor a partir del 1 de julio, Beatriz González explica que, realmente, se aplicará cuando se haga la inspección técnica, que se hace cada dos, cuatro o seis años. "Por lo tanto, si una comunidad de propietarios acaba de pasar una inspección, no se le aplicará hasta dentro de cuatro años o incluso más", detalla. En ese momento será cuando se tendrán en cuenta unos plazos determinados en función de la actuación. Por ejemplo, mientras que para la parada de precisión hay un plazo de un año, para actualizar los contrapesos o las guías se extienden hasta incluso los 10 años en según qué actuaciones.
Algunos ascensores quedarán muy pequeños
En algunos casos, cuando el hueco del elevador es reducido, algunas comunidades de propietarios deberán hacer frente a meter el contrapeso, por lo que pasarán de tener un ascensor de tamaño estándar a uno "enano, de solo dos plazas". "Al meter el contrapeso dentro del hueco del ascensor se come bastante el espacio", añade Beatriz González. Cabe resaltar, además, que los cambios a merced de la nueva normativa podrán hacerse sin necesidad de votación por la comunidad, ya que son de obligado cumplimiento.
De hecho, con esta ley de ascensores, la quinta reforma que los regula de la historia de España, también se contemplan sanciones muy elevadas para aquellas comunidades que no cumplan con lo establecido. Las más leves parten de los 60.000 euros, las graves por 6.000.000 y las muy graves por hasta 100.000.000 de euros.
Las empresas encargadas del mantenimiento de los ascensores también sufrirán cambios, pues se unificará el sistema. No obstante, al tener las comunidades de propietarios un amplio plazo para hacer todas las actuaciones, no se verán colapsadas.
