Zaragoza
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Se orina en la barra de un bar y acaba detenido por golpear a los policías que habían resuelto el entuerto

Durante la intervención en el barrio del Picarral de Zaragoza  lo tuvieron que reducir hasta en tres ocasiones e intentó escapar.  

Coche patrulla de la Policía Nacional en Teruel.
Coche patrulla de la Policía Nacional.
Heraldo.es

Un hombre de 34 años que pretendía marcharse sin pagar de un bar de Zaragoza y que se orinó en la barra a la vista del resto de clientes acabó detenido no por lo anterior, sino por agredir hasta en tres ocasiones a los policías nacionales que habían resuelto el entuerto de manera pacífica.

Los agentes acudieron el sábado por la tarde al un bar de la calle de Salvador Allende en el barrio del Picarral por una llamada que informaba de que un individuo no quería pagar y estaba molestando e insultando a los parroquianos. Los policías y se entrevistaron con la camarera, la cual les explicó que en el intervalo transcurrido entre el aviso al 091 y su llegada el hombre no solo seguía en la misma actitud sino que se había orinado en la barra delante de ellos. Los funcionarios se entrevistaron con el aludido, A. L. Z., y este se avino a pagar la consumición y a abandonar el bar de forma voluntaria.

Así lo hizo, pero, al salir a la calle y cuando los policías ya se iban comenzó a insultarlos gravemente con frases como "eres una zorra" o "asquerosos de mierda". En ese momento, los agentes le informaron de que iban a sancionarlo y le pidieron la documentación para identificarlo. Según reflejaron luego en las diligencias, la respuesta de él fue otro insulto y salir corriendo intentando escapar. El funcionarios le dio alcance, pero A. L. Z. le lanzó varias patadas causándole lesiones  y ofreció tal resistencia que necesitó el apoyo de la compañera para reducirlo. 

Cuando entre los dos lograron meterlo en el vehículo policial, el hombre continuó con las amenazas, insultos y golpes dentro del habitáculo. La misma actitud tuvo en el Hospital Provincial al que fue trasladado y del que quiso escapar y volvió a darle una fuerte patada al funcionario. 

Por segunda vez hubo de ser reducido y, en esta ocasión, lesionó a la policía en una muñeca. Una vez atendido por los facultativos y cuando era trasladado de nuevo a la comisaría, trató de agredir por tercera vez a los funcionarios y, a fuerza de patadas en la puerta, desencajó la ventanilla del coche patrulla. Entre las pertenencias del arrestado se encontró una tarjeta bancaria a nombre de una mujer, que resultó ser empleada de A. L. Z. y que ignoraba por completo que la tenía él. 

Tras pasar la noche en el calabozo, este domingo fue puesto a disposición judicial por atentado a la autoridad y lesiones y quedó en libertad asistido por el letrado Luis Ángel Marcén, del despacho de Carmen Sánchez. Al detenido le constan 14 detenciones previas, las últimas por atentado y conducción bajo la influencia del alcohol y lesiones.

 

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