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Las familias denuncian al Justicia el cierre de un aula de 3 años en el Zaragoza Sur

Educación asegura que han descendido las solicitudes y que si es necesario se abrirán clases como se ha hecho en Parque Venecia.

Manifestación de las familias del colegio Zaragoza Sur
Manifestación de las familias del colegio Zaragoza Sur en febrero del año pasado para exigir la licitación del edificio de Secundaria
Francisco Jiménez

Un grupo de familias de niños de 3 años que empezarán el próximo septiembre 1º de infantil en el colegio público Zaragoza Sur ha denunciado ante el Justicia de Aragón el cierre de un aula de 3 años en este centro del barrio de Rosales del Canal. La reivindicación de que se mantengan las actuales tres vías el curso que viene está respaldada por el momento por 1.400 firmas, ya que se siguen recogiendo adhesiones.

Critican que la pérdida de esta vía supone la posible retirada del técnico de auxiliar de educación infantil correspondiente para este curso o que no se incorpore desde el primer día. El colegio ofreció en el proceso de escolarización 63 plazas para 3 años, de las que se cubrieron 48. Los padres consideran que la ratio que resultaría con solo dos clases, de 22 alumnos más 2 con necesidades especiales de apoyo educativo, hace imposible llevar a cabo "una atención individualizada".

En el escrito remitido al Justiciazgo recuerdan que ya perdieron la profesora de apoyo del ciclo de infantil y que, para colmo, este curso se "han recortado" más de 40 horas de apoyos ordinarios.

Aseguran, además, que el barrio se encuentra en una tendencia de "máximo auge de expansión", y si hay que matricular niños fuera de plazo de familias que se afinquen en la zona con las próximas promociones inmobiliarias no habrá plazas libres. El otro colegio del distrito, el Rosales del Canal, tiene ya las tres vías llenas.

Por su parte, fuentes del Departamento de Educación señalan que no se han completado las tres clases de 3 años "por descenso de peticiones frente a años anteriores". Ante la previsión de incremento poblacional que alegan los padres, aseguran que "se actuará y atenderá cuando se produzca sin ningún problema". Ponen como ejemplo que así se ha hecho en Parque Venecia, "con la apertura de dos vías públicas para garantizar que todos los niños se escolarizan en el barrio".

Preocupación por las segundas aulas TEA

Por otra parte, las comunidades educativas de los colegios públicos Ciudad de Zaragoza y Monsalud, ambos del barrio zaragozano de Las Delicias, están preocupados por el proyecto del Departamento de Educación de poner en marcha en ambos centros una segunda aula para niños diagnosticados con Trastorno del Espectro Autista (TEA). 

El problema radica en que se trata de escuelas de dos vías que ya cuentan en ambos casos con un recurso de estas características en los que el número de escolares prácticamente duplica la ratio, que es de siete niños por aula. Temen que la puesta en marcha de dos nuevas se traduciría en un incremento importante de la cifra de usuarios y las dos volverían a estar saturadas.

“Las aulas TEA son muy necesarias ya que actualmente cada vez hay más niños escolarizados y la demanda es grande. Por ello, si contamos ahora con una que sobrepasa con creces la ratio, todo indica que acabaremos con dos en la misma situación”, explican desde la asociación de madres y padres (ampa) del Ciudad de Zaragoza. Este colectivo plantea que se creen en establecimientos concertados como Claretianas y Enrique de Ossó.

No es la primera vez que el Departamento de Educación pone sobre la mesa esta planificación, ya lo hizo el anterior cuatripartito de gobierno (PSOE, PAR, Podemos y CHA), aunque nunca acabó de cuajar. Anteriormente, la iniciativa no se llevó a cabo al acogerse los colegios a que al tratarse de una ampliación de aulas para escolares con autismo se debía contar con su visto bueno.

Ante esta inquietud, Educación explica que se respetan las decisiones de las familias que quieren escolarizar a sus hijos en estos centros. Añade que con estos niveles de alumnos con TEA matriculados, lo que se hace es “dotar de recursos como si tuvieran dos aulas” y en ese momento la ratio “queda cerrada y los grupos también, por lo que no pueden entrar más niños”. “O sea, automáticamente se cierra la admisión”, dejaron claro desde el Departamento. Asimismo negaron que este tipo de ampliación de clases TEA tenga que “autorizarla” la comunidad educativa.

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