Interiorismo
Tendencias en decoración: la sencillez que 'adereza' a la cocina del hogar
Las cocinas han evolucionado hasta convertirse en un espacio sobrio, elegante y recogido.
La cocina, al igual que el resto de estancias del hogar, se conserva ya como un espacio sobrio, elegante y armonioso. Las tendencias de interiorismo, impulsadas principalmente por el minimalismo, han llevado a que la zona de cocinar la protagonice una isla con tan solo un grifo y, a sus orillas, la nada. Incluso en las cocinas más grandes ya no se utilizan armarios altos.
A lo que este periodista se refiere es a que, con la flamante cocina abierta (gran parte de las reformas en la vivienda son para tirar los tabiques que unen estas estancias), los elementos que la conforman han introducido sutiles cambios hasta conformar lo que se ve en las revistas de interiorismo a día de hoy. La isla es la gran protagonista, mientras que los electrodomésticos y el mobiliario pasan a segundo plano. Tanto, que la vitrocerámica puede ser invisible, las puertas son escamoteables y solo rompen la estética el microondas y el horno.
Todo depende del tamaño de la cocina, claro, pero la novedad es prescindir de esos armarios colgantes que, habitualmente, se sitúan encima del fregadero. "Esto se hace en cocinas muy grandes en los que puedas tener otras opciones de almacenamiento, ya sean vitrinas de suelo a techo, islas... En cocinas pequeñas quieres aprovechamiento al máximo y se utiliza mucho el mueble alto", comenta Jaime Uruen, interiorista del estudio Acuatro. De hecho, cuando no hay tanto espacio como para retirar los armarios, los clientes solicitan vitrinas acristaladas. "Ahora ha vuelto. No de la forma que se ponía antes, pero sí con perfiles metálicos, cristales ahumados, que quedan un poquito más modernos", añade.
Con ello se consigue una sensación de amplitud, de limpieza visual. El objetivo es integrar toda la cocina: "Se busca que todo sea escamoteable y que todo electrodoméstico, salvo los que no se puedan ocultar, quede escondidos y todo quede más limpio", declara Uruen. En las cocinas grandes, los armarios altos desaparecen y se aprovechan otros espacios para guardar la vajilla, por ejemplo. Otra alternativa que no sea un vidrio es la de las estanterías, para dejar algunos elementos de la cocina al aire.
Iluminación y materiales
La elegancia del aspecto moderno de las cocinas se logra, además, gracias a la iluminación y los materiales. La arquitecta María Arilla explica que "los colores que más se llevan, en consonancia con el resto de la casa, son los que evocan a la naturaleza, con tonos claros como la terracota". "La última tendencia que hemos detectado es que ya no se hace una cocina con el mismo color en la encimera y en las puertas", añade.
Así, pueden ir a juego la isla con la mesa del salón, pero la pared en la que se sitúan los electrodomésticos de otro. "Incluso, otra tendencia es imitar la piedra o la madera para dar el toque más natural al hogar", asevera María Arilla.
En cuanto a la iluminación, los interioristas expresan que es clave a la hora de establecer un buen salón-cocina. En este caso, el espacio para cocinar requiere de una luz más blanca que la que se busca en la zona de descanso. No obstante, no hay mejor iluminación que la natural, por lo que unos buenos ventanales harán su función hasta que se vaya el sol.
