Primera ruta de tardeo dulce en Zaragoza
Este sábado, 27 de julio, se estrena esta oferta para disfrutar en familia. participan siete establecimientos que ofrecen tartas, zumos naturales y cócteles para disfrutar en familia.
El tardeo llegó para quedarse después de la pandemia y sigue evolucionando. Lo último alrededor de este modelo de ocio y disfrute es el tardeo dulce. La idea se les ocurrió a Jesús Rodríguez y a Ámbar Guadix al comprobar que los clientes de su local, Extrem Gastro&Bakery (avda. Pablo Gargallo, 15. Local 28), les preguntaban por la posibilidad de hacer un tardeo dulce con niños pequeños para disfrutar de una tarde en familia sin tener que dejar a los hijos con los abuelos o quedarse en casa.
A raíz de esta inquietud, Jesús, que está al frente de una empresa de comunicación, sondeó la opción de que se incorporasen más establecimientos y, finalmente, este sábado 27 de julio se va a celebrar la primera ruta de tardeo dulce en Zaragoza. El horario previsto es de tarde, desde las 17 hasta las 21 horas aproximadamente.
“Es una prueba piloto en la que participan siete locales -explica Jesús Rodríguez- pero la idea es que a partir de septiembre se incorporen más y que, por lo menos, la ruta se pueda celebrar una vez al mes”.
El planteamiento gastronómico de esta iniciativa, según sus promotores, es que los establecimientos participantes ofrezcan zumos naturales para los más pequeños junto con dulces elaborados con ingredientes saludables. Y para los mayores, tartas, cócteles, vinos y copas. Para Jesús y Ámbar “es una manera distinta de pasar una tarde en familia y que haya rotación en las distintas cafeterías zaragozanas”.
La ruta de tardeo dulce
La propuesta de Extrem Gastro&Bakery pasa por ofrecer un amplio surtido de zumos naturales como los de mamey y piña, y mora y fresas, dos de los más diferentes, además de cócteles. Entre ellos, el más novedoso es el tequimoji, elaborado con cerveza, cítricos y tequila.
Pero sin duda alguna, las tartas son la especialidad de la casa. Ámbar Guadix es maestra pastelera y todas las tartas que hay en su local son caseras. Los fines de semana suele haber hasta diez. Las fijas casi siempre son tres de queso: de dulce de leche para los muy golosos, galleta Lotus y pistacho. “La gente me las quita de las manos”, asegura. También triunfan las de chocolate y cerezas, y la de zanahoria con crema de galletas.
En Amazonic by Gala (c/ Santa Teresa de Jesús, 26), los jóvenes colombianos Camilo Andrés Casalla y Lina Vanesa Soto fusionan Sudamérica y el Mediterráneo en su restaurante. La coctelería tiene mucho protagonismo y son expertos en trabajar las frutas tropicales que incorporan a muchos platos, pero también a cócteles y zumos.
Para esta ruta, los pancakes o tortitas caseras tienen un apartado propio. El de taro es uno de los más sugerentes. Es de arándanos relleno de frutas de temporada bañado en chocolate Kinder caliente y avellanas tostadas.
En Molarepa (c/ Santa Catalina, 1) hay unos cuantos argumentos dulces para este tardeo. Por ejemplo, las arepitas con nata, y como productos salados para un picoteo informal, los tequeños o el queso frito. Entre las tartas, la de tres leches es la más aclamada junto a la parchita. La visita a Molarepa también permite disfrutar de bebidas venezolanas como la Frescolita, y los cócteles y los zumos naturales ofrecen mucho recorrido.
En Distrito 37 (c/ Azoque, 37) también han incorporado los tequeños, mientras que sus elaboraciones dulces se centran en un coulant de chocolate relleno de crema de pistacho y helado de vainilla, tarta de queso casera y torrija con helado de vainilla.
En Dídola Café (c/ Don Jaime I 28) las tartas tiene un gran protagonismo en esta ruta. Suelen cambiar, pero normalmente están disponibles la carrot cake, red velvet, oreo y pantera rosa. Especialmente llamativos son el grofe goloso y la hot cookie.
Finalmente, los dos últimos establecimientos que participan en esta ruta de tardeo dulce son el restaurante Pájaros en la Cabeza (avda. Juan Pablo II, 42) y Slow Coffee (c/ Alfonso V de Aragón, local 1).
