La nueva Romareda mantiene en su proyecto de ejecución un aforo de más de 43.000 espectadores
Los socios, Idom y la UTE OHLA-Deltapunt ultiman los preparativos para iniciar las obras el próximo lunes. La alcaldesa de Zaragoza descarta que vaya a haber «sorpresas negativas» con el presupuesto definitivo.
La nueva Romareda mantiene en su proyecto de ejecución un aforo de más de 43.000 espectadores, dimensión que le permitirá ajustarse a las exigencias de la Federación Internacional de Fútbol (FIFA) para las ciudades que acogerán partidos del Mundial 2030.El documento, en manos del Ayuntamiento, el Gobierno de Aragón y el Real Zaragoza desde el pasado viernes, se empezará a analizar esta misma semana con los técnicos autonómicos y municipales.
El número de espectadores no variará significativamente respecto a 43.184 que aparecían en el proyecto básico. Aunque la cifra provocó reticencias en un sector del zaragocismo, que temía que el estadio pudiera quedarse pequeño –especialmente si el equipo terminaba subiendo a Primera División–, la propuesta final no ha experimentado cambios, descartándose que la nueva Romareda vaya a convertirse en un campo para 46.000 o 48.000 personas como pedían algunos aficionados.
Los pilares básicos del anteproyecto y el proyecto básico presentado por César Azcárate se mantendrán, estando aún por concretar cuál será el presupuesto definitivo del nuevo estadio. Ayer, la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, descartó que vaya a haber "sorpresas negativas" en este sentido. Las partes aprovecharán el mes de julio para revisar el extensísimo trabajo desarrollado por Idom en estos últimos cinco meses de cara a que salga a licitación con el mínimo número de errores. "Necesitamos sentarnos a verlo. Estas semanas nos dedicaremos no solo a conocerlo, sino a analizarlo a fondo con los técnicos y el gerente de la sociedad de La Nueva Romareda", dijo la regidora.
La previsión es que el coste final vaya en la línea del importe acordado, unos 150 millones de euros, sin IVA. Los socios pidieron expresamente que fuera así y, según ha podido saber este diario, Idom ha trabajado escrupulosamente para que el coste no se disparase. De hecho, este era un objetivo prioritario para los entre 50 y 60 empleados de las oficinas de Zaragoza, Madrid, Barcelona y Bilbao que han estado ocupándose del proyecto.
El orden de la demolición
Respecto a las fases, reducidas a dos como consecuencia de la apuesta por un estadio modular en el Parking Norte de la Expo, no se descarta que las tres partes restantes del estadio– Tribuna Este, Preferencia y Gol Norte– puedan derribarse de una sola vez tras la demolición del Gol Sur. "Eso es lo que entiende que sería lógico, pero tenemos que conocer el proyecto", subrayó Chueca.
A nivel constructivo, es la opción más plausible, ya que ampliaría la superficie en la que se podría trabajar, pero todo dependerá del contratista que asuma las obras de esta segunda fase o de factores como la retirada del amianto de toda la cubierta, por lo que se tendrán que estudiar todas las alternativas para minimizar riesgos y evitar posibles problemas o retrasos.
Tramites previos
Los socios de La Nueva Romareda SL, Idom y la Unión Temporal de Empresas (UTE) que se encargará del derribo del Gol Sur, la antigua gerencia de Urbanismo y el Cubo –formada por OHLA y Deltapunt– ultiman estos días todos los preparativos para que las obras puedan comenzar el próximo lunes.Durante las primeras jornadas habrá que vallar el recinto, hacer el acta de replanteo, aprobar el plan de seguridad laboral, llevarlo a Inspección de Trabajo y desmontar el escenario del concierto de Enrique Bunbury, entre otros trámites.
También se está pensando ya en el dispositivo que será necesario de cara a la entrada de las máquinas, que requerirá la acción coordinada con servicios municipales como la Policía Local.
