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El PSOE critica que en Zaragoza hay pisos municipales okupados sin ser desalojados desde hace 5 años
Pide al gobierno que "provea a sus vecinos la sensación de vivir seguros y en condiciones de convivencia razonables".
El grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Zaragoza ha criticado este lunes "la dejadez y la desidia" del Gobierno de Natalia Chueca a la hora de afrontar graves problemas como la ocupación ilegal de viviendas, con pisos municipales sin ser desalojados desde hace cinco años, en un fenómeno que "preocupa muchísimo" y que se produce en los barrios más vulnerables, como Delicias, Las Fuentes o los entornos de Balsas de Ebro Viejo o Zamoray-Pignatelli.
El PSOE ha forzado una comisión extraordinaria de Urbanismo, celebrada este lunes, en la que concejal del Área, Víctor Serrano, ha reconocido que, tras cinco años de gobierno del PP, hay pisos municipales ocupados ilegalmente sin que "se hayan iniciado los trámites y las acciones judiciales para su desalojo a día de hoy" ni se hayan llevado a cabo las medidas oportunas para poner fin a esta situación, dado que la ciudad dispone de un parque de vivienda social y de servicios sociales "capaces de intervenir en casos de vulnerabilidad".
Según el concejal socialista Horacio Royo, el Gobierno de Chueca está afrontando este grave problema "con brocha gorda" cuando lo que se trata es que el Ayuntamiento "provea a sus vecinos la sensación de vivir seguros y en condiciones de convivencia razonables".
Por ello, y también para hacer frente a los "discursos racistas de Vox" sobre este problema, el PSOE, ha tendido la mano al PP para poner en marcha un protocolo de intenciones de cara a agilizar los trámites de bolsa de vivienda social y servicios sociales cuando la ocupación ilegal afecta a personas vulnerables o niños, así como incidir en la inspección urbanística para poder intervenir en pisos propiedad municipal.
"Los vecinos de entornos como Zamoray-Pignatelli lo están pasando muy mal por la ocupación ilegal de viviendas, con la delincuencia y la degradación de muchos edificios en condiciones deplorables", ha señalado, y ha recordado que, cuatro años y medio de después de la aprobación del Plan Especial, "la situación es igual, con los mismos problemas de convivencia, de delincuencia, limpieza, con los mismos edificios amenazados en ruina y el mismo problema transversal de la ocupación igual". "Tenemos un problema objetivo en un entorno pequeño que reúne problemas, conflictos y dificultades que requieren esfuerzos más elevados", ha considerado.
Ha añadido que este problema se basa en grandes tenedores de vivienda, fundamentalmente fondos de inversión, que toleran la ocupación y no van al juzgado a desalojar "hasta que no le salen las cuentas para cuadrar los balances".
