La Policía Nacional desmantela dos pisos en los que se vendía droga en Zaragoza
Dos de los tres detenidos el pasado viernes en el entorno de la avenida de Valencia han sido enviados a prisión preventiva.
La Policía Nacional detuvo en Zaragoza el pasado viernes a tres jóvenes a los que acusa de vender droga, especialmente cocaína y tusi, una sustancia que habitualmente se forma con MDMA y ketamina. La operación permitió también registrar los dos pisos en los que almacenaban los estupefacientes y en los que los investigadores entienden que llevaban a cabo parte importante de sus transacciones. Se localizan en la calles del Pianista Eduardo del Pueyo y Tarragona, en el entorno de la avenida de Valencia.
Los agentes se incautaron en sus actuaciones de 53,27 gramos de cocaína y de 54 gramos de ketamina que en el mercado ilegal podrían alcanzar un valor de 3.140 y 2.678 euros, respectivamente. También encontraron aproximadamente 30 gramos de MDMA con ketamina, 33 cartones o papeles secantes de lo que los investigadores creen que es LSD y una pequeña cantidad de marihuana. Además, requisaron útiles que permitirían preparar tusi -conocido erróneamente como cocaína rosa- como un molinillo, una báscula electrónica, cucharas, paletas y un cepillo en los que había restos de polvo rosa junto a bolsitas con autocierre, aromas y colorantes. Más allá de todo eso, requisaron igualmente una pistola de balines y 2.485 euros en efectivo.
Los tres arrestados pasaron el sábado a disposición judicial. Tras prestar declaración, el Juzgado de Instrucción número 5 en funciones de guardia decretó prisión preventiva para Felipe G. R. y Eider M. C. Por su parte, Hamilton P. C. fue puesto en libertad. La defensa de los tres la han asumido los abogados Carmen Sánchez, Luis Ángel Marcén y Candela Garries.
La investigación comenzó en abril después de que el Grupo II de Estupefacientes tuviese conocimiento de que en un piso de la calle del Pianista Eduardo del Pueyo residía un grupo de jóvenes que podían estar vendiendo drogas. Se estableció un dispositivo de vigilancia en la zona con el que pudieron corroborar la actividad delictiva y observar que no solo traficaban dentro de la vivienda o en el portal, sino también en las inmediaciones y en otros lugares más alejados a los que se desplazaban en patinete. En el transcurso de las pesquisas, Eider M.C. se mudó al piso de la calle de Tarragona, desde donde la Policía afirma que seguía realizando transacciones. Ni siquiera la detención en mayo del que era considerado su proveedor cuando estaba transportando a Zaragoza junto a otra persona más dos kilos de cocaína y tres de ketamina les frenó.
El viernes, una patrulla de la Brigada de Seguridad Ciudadana, sorprendió a Eider M. C. portando 52,9 gramos de cocaína que se cree que acababa de comprar a una tercera persona. Su arresto desencadenó la operación. Posteriormente, en las inmediaciones de sus domicilio, se encontraron a sus dos compañeros y se procedió a registrar las viviendas.
