Condenado un preso que atacó a los agentes que le pidieron las pulseras y cadenas al ingresar en un hospital de Zaragoza
La negativa de Juan Ramón F. R. a entregar sus efectos personales desencadenó un violento altercado en el módulo de reclusos que se saldó con dos policías y un guardia civil heridos.
Fueron necesarios dos funcionarios de la Policía Nacional y otros dos de la Guardia Civil para reducirlo y de ellos tres sufrieron heridas. Todo porque no le parecieron bien algunas de las normas que debía cumplir tras ser ingresado en el Hospital Miguel Servet en el modulo reservado para presos. El Juzgado de lo Penal número 4 de Zaragoza condenó este lunes a Juan Ramón F. R. a 9 meses de cárcel por un delito de resistencia y a una pena multa de un mes a razón de 3 euros diarios por cada uno de los tres delitos de lesiones leves de los que estaba acusado por el violento altercado que protagonizó el 9 de abril del año pasado. En él, además de dar golpes, llevó a proferir amenazas a los agentes: “Mi familia os va a matar”.
En un primer momento, la Fiscalía solicitaba un castigo de 2 años y medio de prisión por atentado a agente de la autoridad. Sin embargo, las partes alcanzaron un acuerdo previo a la celebración de la vista oral que permitió la rebaja de la condena. En cuanto a la responsabilidad civil, quedó fijada en 1.950 euros a repartir entre los tres funcionarios policiales heridos.
La cantidad principal, 1.740 euros, la recibirá el policía nacional que se llevó la peor parte en cuanto a golpes y que permaneció 29 días de baja tras sufrir una fisura costal y dolor en el codo derecho. Durante el proceso judicial ha estado representado por los abogados Marco Antonio Navarro y Carlos Álvarez, al igual que el guardia civil lesionado, que arrastró durante cuatro días dolores en la parte posterior del cuello, la mandíbula y la muñeca izquierda. Por su parte, el segundo agente de la Policía Nacional, para el que ha ejercido la acusación la letrada Pilar Sangorrín, tuvo una lesión superficial en la piel.
Aquel 9 de abril, Juan Ramón F. R. fue trasladado por la Guardia Civil desde el centro penitenciario de Zuera hasta el Hospital Miguel Servet. Sobre las 20.40, ya en la habitación que se le había asignado, los agentes de Policía Nacional responsables del módulo para presos le informaron de las normas de obligado cumplimiento, una serie de reglas que incluyen la imposibilidad de portar cadenas, pulseras y cordones por motivos de seguridad.
El acusado, muy nervioso, no solo se negó a entregar sus pertenencias, sino que agarró de la camisa a uno de los policías a la vez que le dio un golpe en la oreja izquierda. Para inmovilizarlo, mientras no paraba de soltar puñetazos y patadas, fue necesaria la intervención del otro funcionario de la Policía Nacional y la de los dos guardias civiles que habían acompañado al preso desde Zuera.
Juan Ramón F. R., de cuya defensa se ha responsabilizado por el turno de oficio el abogado Daniel Sánchez, tenía en el momento de los hechos 33 años y es natural de Huelva. En su historial figuran 15 antecedentes previos por delitos como detención ilegal, robo con violencia e intimidación y robo con fuerza. Este lunes compareció por vía telemática desde el centro penitenciario de Córdoba.
