ENCUESTA A+M SOBRE INTENCIÓN DE VOTO autonómico
Encuesta: El PP lograría un resultado histórico en Aragón con 31 diputados y el PSOE mantendría los 23
Azcón podría gobernar en solitario o repetir con Vox en un Parlamento menos fragmentado. Podemos y PAR desaparecerían e IU corre el mismo riesgo.
El Partido Popular que lidera Jorge Azcón lograría un resultado histórico y con 31 escaños, uno más de los que obtuvo Luisa Fernanda Rudi para llegar al Pignatelli en 2011, revalidaría con creces la victoria electoral obtenida el pasado 28 de mayo. El actual presidente sumaría más votos que todo el bloque progresista unido, lo que le permitiría incluso gobernar en solitario en un Parlamento menos fragmentado, sin necesidad de revalidar la coalición con Vox que le garantizó hace ocho meses ponerse al frente del Pignatelli con mayoría absoluta.
Así lo revelan los resultados del sondeo electoral de A+M para HERALDO, que apunta a la desaparición de la formación bisagra que tradicionalmente ha decidido quién gobernaba en Aragón. El Partido Aragonés, con tan solo un 1% de la intención de voto, culminaría su sangría en las urnas y de representación al perder su actual único escaño tras 41 años de presencia en el Parlamento.
La misma suerte correría Podemos, que tuvo una irrupción meteórica en 2015 con 14 parlamentarios, de los cuales solo conserva uno en la actualidad. De este modo, seguirían el camino de Ciudadanos, desaparecido hace once meses tras haber llegado a ser la tercera fuerza política con doce representantes hace tan solo cinco años.
El arco parlamentario aún se podría reducir más, de 8 a 5 partidos, porque el diputado de IU estaría en la cuerda floja . Habría que remontarse hasta 2011 para encontrar solo cinco grupos en las Cortes de Aragón tras el récord de 2019 y 2023, con ocho partidos, al irrumpir nuevas siglas.
Jorge Azcón se beneficiaría con claridad de la polarización política que lleva a la concentración del voto. Hasta cinco puntos crecería ahora respecto a las elecciones celebradas hace casi un año, hasta alcanzar el 40,18%, y con ello pasaría de 28 a 31 escaños. El sistema electoral vigente en España, que asigna los escaños de forma proporcional por el método d’Hondt, beneficia a los partidos mayoritarios y el presidente aragonés podría acaparar los diputados obtenidos por IU y Podemos en Zaragoza y el del PAR por Teruel.
El hito autonómico
Con solo cuatro décimas más del mejor balance del PP, el obtenido por la expresidenta Rudi, se convertiría en el líder con el grupo parlamentario conservador más amplio en las Cortes de Aragón. Eso sí, aún le quedaría un trecho para desbancar al presidente que ha logrado la mayor victoria, el socialista Santiago Marraco, que en la primera cita autonómica con las urnas, la de 1983, consiguió 33 de los 66 escaños que había entonces y gobernó en solitario. Desde entonces, el número de diputados pasó a 67 y siempre se han requerido alianzas para llegar al Pignatelli.
De hecho, los mejores resultados cosechados por los partidos mayoritarios se han limitado a 30 parlamentarios en el resto de las once legislaturas transcurridas en cuatro décadas (los que consiguió el PSOE en 1991 y 2007 y el PP en el citado 2011).
Si los aragonesistas han mantenido la llave de la gobernabilidad con la excepción de 2019 y 2023, la extrema derecha la ejercería ahora con ocho representantes, uno más que en la actualidad. La formación que lidera el vicepresidente aragonés, Alejandro Nolasco, rentabilizaría el retroceso de Aragón-Teruel Existe al ganar uno de los tres representes en el Parlamento por la provincia en la que surgió el movimiento ciudadano reconvertido en partido.
No obstante, los de Vox estarían condenados a entenderse con el PP porque la otra opción, un gran pacto como hizo el PAR hace cuatro años con todo el arco progresista, se antoja imposible ante sus posicionamientos antagónicos.
Pequeño repunte del PSOE
La misma concentración del voto favorecería a los socialistas, que lograrían mejorar un punto sus resultados, hasta llegar al 30,74%, respecto a los comicios de 2023. Esto les garantizaría seguir como referencia de la oposición con 23 escaños. La distancia con el PP sería de once puntos en la provincia de Zaragoza y de ocho Teruel, pero se limitaría a cinco en Huesca.
También mejoraría su intención de voto Chunta, aunque en su caso limitándose a tres décimas, suficientes para llegar a un 5,35% y estar en disposición de revalidar su tercer legislatura seguida con tres parlamentarios. Dos los volvería a lograr por Zaragoza y otro por Huesca, dado que Teruel seguiría sin despegar, solo rozando el 2%.
Teruel Existe perdería uno de sus representantes al caer cinco puntos (del 20,97% a 15,67%), pero peor consecuencia tendría para el PAR su retroceso de dos puntos en la misma provincia (del 6,6% al 4,39%) al desaparecer del Parlamento autonómico. Y parece difícil su recuperación cuando ni siquiera es uno de los seis partidos por los que se decantan los encuestados en la provincia de Zaragoza y es la última opción en la de Huesca.
Algo similar le ocurre a Podemos en Zaragoza, donde hace once meses obtuvo su único diputado. Y lo perdería con claridad porque de tener un 4,3% de los votos pasaría únicamente a conservar un 1,95%. En su caso, tampoco le acompañan los resultados en la sucesión de elecciones, porque ni en Galicia ni el País Vasco ha logrado ahora representación parlamentaria.
El resultado histórico del PP dependerá, no obstante, de que IU no lograra mantener su escaño de las siete últimas legislaturas, con la excepción de la de 2011-2015, cuando se fue a cuatro. La formación a la izquierda del PSOE mantiene un voto fiel y en las autonómicas siempre ha logrado salvarse. En 2003, con un 3,06%, consiguió su representante y en el sondeo se queda a cuatro décimas, con un 2,62%
