Máximo Huerta, ingresado en el hospital, no puede venir a la Feria del Libro de Zaragoza

El escritor valenciano, que iba a encontrarse con su masa lectora zaragozana este sábado 1 de junio en el Kiosko de las Letras, sufre una severa diverticulitis

Máximo Huerta, en una anterior visita a Zaragoza.
Máximo Huerta, en una anterior visita a Zaragoza.
Guillermo Mestre

El escritor y librero valenciano Máximo Huerta, una de las figuras más populares en el listado de firmas de la inminente Feria del Libro de Zaragoza, deberá aplazar su cita con los seguidores de su obra en la capital zaragozana debido a un trastorno médico.

Según informaba este jueves 30 de mayo su editorial, Planeta, Huerta está ingresado en el hospital por una severa diverticulitis, que lógicamente le impide cumplir sus compromisos profesionales en los próximos días. Hay que recordar que la diverticulitis es una dolencia muy molesta, que puede resultar severa de no ser tratada con rapidez y esmero; aparece con la inflamación o infección de los divertículos, pequeñas bolsas o sacos abultados que se forman en la pared interna del intestino.

Huerta iba a abrir la programación del Kiosko de las Letras (gestionada por Ámbito Cultural de El Corte Inglés) en el Parque Grande José Antonio Labordeta en la mañana de este sábado 1 de junio, poco después de la inauguración de la Feria y el discurso de su pregonera, Ana Santos.

Huerta (Utiel, Valencia, 1971) estuvo presentando en Zaragoza el pasado mes de febrero su último éxito editorial, 'París despertaba tarde', que llevó a los Martes de Libros de la Fundación Ibercaja. El valenciano propone en esta novela un viaje a los maravillosos años veinte de la capital francesa, con el colectivo de artistas de Montmartre como coro argumental de la protagonista. Alice Humbert, apasionada de la moda con el corazón roto y los sueños intactos.

La obra es todo un canto a la vida, al amor verdadero y la amistad femenina: por sus páginas transitan figuras como Kiki de Montparnasse, el pintor Claude Monet o el mismísimo barón Pierre de Coubertin, responsable del olimpismo moderno y figura reivindicada especialmente este año en la capital gala, que organizó los Juegos Olímpicos en 1924 y vuelve a hacerlo este verano.

Desde el hospital, Huerta ha querido recalcar a sus lectores zaragozanos que lamenta el contratiempo que le impide asistir a la cita con el Kiosko de las Letras, y que la actividad no se suspende: solamente se retrasa hasta una fecha idónea para todas las partes implicadas, una vez que se consume su recuperación.

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