Nacional

Save the Children recuerda, ante la ola de calor, que el 34% de las familias no pueden enfriar sus casas

La organización ha expresado su preocupación por las consecuencias sobre una población vulnerable a la que el calor afectará al descanso, calidad de su ocio y rendimiento escolar.

Jóvenes se mojan con chorros de agua en la playa de Madrid Río en una foto de archivo.
Europa Press

El 34% de las familias españolas no pueden enfriar sus casas en los meses de verano. Ante estos datos y el inicio de la ola de calor con temperaturas de hasta 44 grados, la organización ha expresado su preocupación por las consecuencias sobre una población vulnerable a la que el calor afectará al descanso, calidad de su ocio y rendimiento escolar.

Ante esta situación, Save the Children hace un llamamiento para activar políticas públicas de mitigamiento y adaptación de los espacios en los que viven y se desarrollan los niños y niñas. "Los bonos sociales energéticos presentan aún elevadas tasas de no acceso entre colectivos especialmente vulnerables", ha declarado el experto en pobreza de la organización, Diego Santamaría.

"Nuestra propuesta es seguir avanzando en la concesión automática de este tipo de ayudas e implementar los fondos Next Generation de la Unión Europea con planes de adecuación climática de viviendas y edificios", ha indicado Santamaría.

Sarah es madre de tres hijos que vive en un barrio de Leganés (Madrid) y no puede permitirse enfriar su vivienda para afrontar las altas temperaturas pese a tener un hijo Ossama, enfermo de diabetes. "Con el calor su enfermedad se agrava y tengo que evitar que sude mucho y que pase mucho calor porque puede deshidratarse", asegura su madre.

En España son 2,6 millones los niños que viven en hogares en situación de pobreza que no pueden tener su casa acondicionada. Según la Encuesta de Condiciones de Vida del INE, las viviendas de Aragón, La Rioja, Andalucía, Murcia, Islas Canarias y Navarra son comunidades que más problemas pasan para climatizar su casa. De hecho, alrededor de un 40% de las familias de estas regiones reconoce tener dificultades para acondicionar sus casas. El año pasado, Pamplona registró la temperatura más alta de su historia llegando a los 40,6ºC en agosto y Teruel, en 2021, superó los 41ºC.

En este sentido, Santamaría añade que "la climatización de las viviendas no está tan extendida en territorios menos acostumbrados al calor y en barrios desfavorecidos, lo que conllevaría un gasto de instalación que mucha gente no puede asumir. Además de este coste, los precios de los suministros energéticos suponen una carga excesiva en muchos hogares". A esto se suma que el parque de viviendas está especialmente envejecido en barrios de rentas bajas, con edificios energéticamente poco eficientes.

Centros escolares

La ONG ha puesto también el foco en la situación de los centros escolares sobre los que "no existen suficientes datos de la climatización a nivel estatal, autonómico o local". En este sentido , el experto en educación de Save the Children, Alfonso Echazarra, detalla que "es urgente una adaptación de las infraestructuras educativas para evitar la vulneración de los derechos de niños y niñas a la salud, la educación o el ocio".

La organización ha señalado que estos planes deben ser integrales e ir más allá de los espacios de viviendas y escuelas. "La mayor intensidad y frecuencia de temperaturas extremas hacen necesario convertir las ciudades en espacios adaptados, con refugios climáticos, en espacios públicos que permitan a los niños y niñas desarrollar su ocio de manera segura, saludable y accesible", concluye Echazarra.