gastronomía
La barbacoa coreana que triunfa en el mundo llega a Zaragoza
Korean Style Barbacue, en la plaza de España, es el primer local que ofrece esta comida en la capital aragonesa.
En Corea, la barbacoa está muy ligada a la cultura del país. Algo parecido sucede en Estados Unidos, donde hamburguesas y salchichas a la parrilla están estrechamente vinculadas a su forma de relacionarse socialmente y disfrutar de la gastronomía, pero a una y otra les separan unos cuantos siglos de historia.
La barbacoa coreana también es conocida como 'gogi-gui'. La globalización ha contribuido a que esta tradición gastronómica haya crecido mucho en los últimos años hasta convertirse en un fenómeno culinario mundial.
A Zaragoza acaba de llegar de la mano de Han Feng y Miri Hu, una pareja china que lleva más de 20 años en la capital aragonesa. Para visibilizar su proyecto han elegido el lugar más céntrico de la ciudad, la plaza de España. Hace unos días que en el número 6 de esta plaza abrió sus puertas el restaurante Korean Style Barbacue Hot Pot.
El establecimiento es como si fueran dos en uno. En la planta calle, la propuesta gastronómica está vinculada al 'hot pot' chino. Igual que la barbacoa, es una comida muy social en la que se comparte a la mesa una misma olla con caldos hirviendo donde se cocinan ingredientes variados: verduras, carnes, casquería, pescado, marisco, pasta… En fin, una opción parecida a la de la parrilla, pero alrededor de caldos con distintas intensidades de picante y de sabores.
El de la plaza de España es el tercer 'hot pot' que abre en Zaragoza en apenas medio año, así que no es lo más novedoso de este proyecto. Lo verdaderamente singular está en la primera planta, donde Han Feng y Miri Hu han reproducido un comedor con barbacoas que perfectamente podría estar en Shangai o en cualquier ciudad coreana.
Un detalle importante de la barbacoa coreana es que la parrilla está incorporada a la mesa. Es lo mismo que sucede con el 'hot pot' y sus caldos. De esta forma, los comensales participan activamente a la hora de cocinar los ingredientes. La experiencia es muy social, interactiva y divertida. Cada persona pone los alimentos que le apetece encima de la plancha y los prepara a su gusto, más o menos hechos y con las especias y condimentos deseados.
La carta de Korean Style Barbacue es amplia. Además, Miri comenta que no solo hay carne. Algunos despieces van marinados y otros no. Los cortes de ternera son los que más se piden, desde churrasco a lomo, entrecot o dados de solomillo, pudiendo también elegir vacuno de raza Angus.
Además, hay cerdo, pollo y cordero para hacer las clásicas costillas que se ofrecen con marinados únicos o a gusto del comensal. Para aderezar estas carnes hay salsas elaboradas o la posibilidad de que cada cliente se elabore la suya propia. El picante está muy adaptado al paladar occidental, así que el punto de partida es bastante tolerable. También triunfan los sabores agridulces.
La degustación se puede iniciar con vegetales como lechuga, pepino, calabacín o tomates cherry, que igualmente se ponen en la barbacoa. “En Corea las hojas de la lechuga se utilizan como si fuera un taco mexicano, para envolver la carne o cualquier otro ingrediente con las salsas”, explica Miri.
En fin, que en esta propuesta no solo hay carne, sino también otros pequeños platillos de acompañamiento como ensalada de pepino o de wakame, arroces, empanadillas, sopa de algas y tofu, o bolas de taro. Además, está la opción de acompañar los productos asados a la parrilla con ollas que salen a la mesa para elaborar pasta de arroz, noodles o fideos.
Un extractor de humos sobrevuela las cabezas de los comensales, así que la parte incómoda que supone preparar una barbacoa en un recinto cerrado está bastante bien resuelta. Si no se quiere arriesgar, está la opción de recurrir a embutidos como longaniza, chorizo o morcilla. También hay madejas y, para los más atrevidos, intestinos de cerdo, ancas de rana o garras de pollo deshuesado. Por último, zamburiñas y gambas son algunas de los productos del mar más demandados. Eso sí, los postres no se ponen encima de la plancha caliente.
