La aragonesa Prodesa cumple 25 años fabricando ya en el PTR piezas para plantas de pellets
La compañía ultima la construcción de la sede en Zaragoza en la que agrupará su actividad corporativa, de producción y logística.
Prodesa Medioambiente, ingeniería aragonesa que suministra proyectos llave en mano de plantas completas de producción de pellets de biomasa, celebra sus 25 años de andadura en un momento trascendental en su trayectoria. La empresa que preside José Ignacio Pedrajas ultima la construcción de las nuevas instalaciones de la compañía en el Parque Tecnológico del Reciclado (PTR) de Zaragoza, donde ya está en marcha su actividad productiva. La firma mantiene aún sus oficinas en Plaza, pero estima que las obras ahora en marcha permitan que la sede que reunirá sus diferentes actividades –de ingeniería, fabricación y logística, además de la administrativa– estén listas para su inauguración, prevista para finales de septiembre.
Fue el 15 de julio de 1999 cuando Prodesa empezó a operar de modo oficial, si bien Pedrajas ya se había movido desde un año antes para buscar financiación para un proyecto cuyo futuro veía con claridad. Dejó la empresa en la que trabajaba en Zaragoza unos meses antes y con José Manuel Martínez como socio se embarcó en una aventura que en un principio no salió como preveía. Un viaje a Suecia le había confirmado que la producción de pellets de biomasa era el futuro para hacer frente a las necesidades de un combustible más barato que el petróleo –«entonces no se hablaba de calentamiento global», recuerda– y puso manos a la obra.
«Pasamos cuatro años de travesía en el desierto, el modelo inicial fracasó estrepitosamente», admite ahora tras reseñar cómo el mercado en el que se metía distaba muy lejos de estar maduro. «Como vi que esto iba a tardar más, decidí moverme y trabajar también en el ámbito de las aguas residuales», narra para explicar cómo sobrevivieron en aquel momento. Prodesa desarrolló sus primeras plantas de pellets de biomasa en 2003, en España los primeros, y a partir de entonces las cosas empezaron a ir mejor.
En 2007, la compañía aragonesa vendió al Grupo Gimeno, de Castellón, la actividad que tenía en aguas residuales y desde ese año se centró solo en las plantas de pellets, la idea original. En España, Francia y Portugal tuvo sus primeros clientes y de ahí dio el salto a las repúblicas bálticas y a Rusia. En 2010 la vista ya estaba puesta en Estados Unidos, país al que el propio Pedrajas se trasladó para abrir una oficina en 2011.
La decisión de instalarse en Atlanta, en el estado de Georgia, se demostró con los años muy acertada. Prodesa creció desde entonces de un modo vertiginoso con proyectos de gran envergadura en Estados Unidos y Canadá. En 2012, la firma dio el salto también al continente asiático, con Vietnam como epicentro fundamental. Las oficinas de Zaragoza, con sus ingenieros y con José Manuel Martínez al frente, siguió siendo fundamental en la operativa.
«Hicimos todo ese recorrido como una ingeniería, pero con el tiempo nos hemos convertido en fabricantes de equipos», apunta José Ignacio Pedrajas al dar cuenta del siguiente paso importante de la compañía. «Con un producto propio podemos competir mejor, controlamos mejor los plazos, la calidad», precisa. «Con más masa crítica, competimos mejor en la posventa», añade a modo de explicación de la integración vertical de las actividades de la empresa. «No lo planeamos así, pero cumplimos 25 años con unas nuevas instalaciones en el PTR que nos permiten dominar todo el proceso», asegura.
El reto de crecer más
Prodesa, afirma Pedrajas (dueño único de la empresa desde 2021, tras la jubilación de José Manuel Martínez) se dispone ahora a impulsar aún más su crecimiento. «Ofrecemos a los clientes un ‘know how’ mayor que el que solo vende equipos», apunta.
Con 142 trabajadores, el 80% en Zaragoza, Prodesa destina a la exportación el 95% de su cartera. La compañía cerró el ejercicio 2023 con un volumen de negocio de 46 millones de euros y la previsión es cerrar el actual año en curso con una facturación de 50 millones.
La compañía ha destinado a sus nuevas instalaciones del PTR una inversión de 11 millones en esta primera fase, que será visible en la inauguración prevista para septiembre. La idea es desembolsar unos 2 o 3 millones más en una segunda fase y a la larga incluso duplicar la inversión en sucesivas actuaciones.
Pedrajas está convencido de que el crecimiento de la empresa continuará con el desarrollo de nuevas plantas de pellets pero prevé un salto aún mayor con el negocio de los repuestos. «Tenemos la mejor tecnología del mercado", afirma. «Podemos competir bien, fabricando en España y vendiendo a países como Estados Unidos con un ‘know how’ en Zaragoza», concluye.
