Real Zaragoza

real zaragoza

Manu Vallejo regresa a los entrenamientos del Real Zaragoza

El atacante ha superado las molestias de rodilla que le impidieron viajar a Oviedo y trabajar con normalidad la pasada semana. Su alta y la de Mollejo pueden facilitar que Marcos Cuenca juegue con el Aragón en Pontevedra la próxima semana.

Manu Vallejo celebra el gol en Cornellá.
Óscar Gil Roig

Manu Vallejo retomó este martes el trabajo con el grupo después de no poder viajar a Oviedo la pasada jornada ni trabajar con normalidad durante la semana debido a unas molestias tendinosas en una rodilla. El atacante gaditano fue así en la sesión de este martes una de las principales novedades del equipo dirigido por Víctor Fernández.

Manu Vallejo arrastró unas molestias al principio de la semana pasada que le impidieron entrenarse en los días posteriores con el grupo. Aunque el club no emitió parte médico, el jugador sufría dolores en una rodilla que aconsejaron dosificar su carga de trabajo. Esto le impidió viajar a Oviedo. Aunque apenas ha participado en los dos últimos meses (solo ha jugado un minutos en los últimos siete partidos), su ausencia a nivel de número tenía efecto ante la acumulación de bajas que sufre el equipo.

A la espera de cómo responde al trabajo durante la semana, Manu Vallejo estaría así disponible para Víctor Fernández, quien también recuperará a Mollejo para el partido contra el Racing de Ferrol. Con estas dos novedades en la parcela ofensiva, el técnico contará, además, con Liso, Valera, Azón, Bakis y Enrich, una vuelta a la normalidad que podría facilitar que Marcos Cuenca, citado por el primer equipo en los últimos partidos, pueda bajar al filial ante el trascendental choque que juega el Deportivo Aragón en Pontevedra por el ascenso a Primera RFEF. 

Cuenca ha sido durante todo el curso la principal baza ofensiva del conjunto de Emilio Larraz, a cuyas órdenes es una pieza clave. Sin embargo, las bajas en ataque en el primer equipo en las últimas semanas -Mollejo, Vallejo…- obligaron a Víctor Fernández a recurrir a él. En Oviedo, Cuenca jugó los últimos cinco minutos, después de saltar al campo tras el tanto del rival asturiano.