La filtración de un vídeo en el que se puede ver a la amazona británica, tricampeona olímpica de doma clásica, Charlotte Dujardin azotar a un caballo con un látigo hasta 24 veces en menos de un minuto le ha obligado a presentar su renuncia "voluntaria" a los Juegos Olímpicos de París y ha conmocionado al olimpismo británico, así como al mundo de la hípica. Tras conocerse que la Federación Ecuestre Internacional (FEI) iniciaría una investigación, la deportista emitió un comunicado en el que que reconoció que su conducta fue "inapropiada". También admitió sentirse "arrepentida y profundamente avergonzada".

La hípica, que buscaba recuperar un prestigio cada vez más socavado por los supuestos malos tratos a los animales, se enfrenta de nuevo a la misión de lavar su imagen. Y es que el video de la amazona alemana Annika Schleu pateando a Saint Boy -su caballo- en los Juegos de Tokio de 2020 dio la vuelta al mundo y puso en evidencia el sufrimiento de los animales que participan en los eventos deportivos.

Como era de esperar, la organización PETA UK -la rama británica del colectivo que defiende los derechos de los animales- también se ha pronunciado al respecto y ha tachado este acto de "horrendo e inaceptable". Además, ha vuelto a pedir al Comité Olímpico, como ya hiciera en 2021, que los deportes ecuestres se eliminen de las competencias deportivas. El movimiento animalista recuerda que no se trata de unos malos tratos aislados y ha sacado a relucir otros casos similares en su cuenta de 'X', en los que, por ejemplo, se ve a un entrenador propinando puñetazos a un caballo.

Dujardin iba a competir en doma individual y por equipos pero ahora será sustituida por Becky Moody. La amazona ahora sancionada se enfrentaba al reto más importante de su carrera, ya que podía superar a la ciclista Laura Kenny como la deportista británica con más medallas olímpicas de la historia. Sus desmanes ya le han hecho perder esa oportunidad.