La familia ajedrecista Cramling-Bellón supera en Alcubierre a 31 jugadores a la vez
Pía Cramling, Juan Manuel Bellón y la hija Anna exhiben un nivel élite en las simultáneas celebradas ayer en el Torneo Internacional de la localidad, logrando el pleno de victorias en menos de dos horas.
El Torneo Internacional de Ajedrez de Alcubirerre es un caso único en el mundo. Se trata de una localidad de 400 habitantes que ha contado con la presencia de cinco campeones mundiales y de grandes figuras y leyendas del ajedrez. En concreto, en la localidad de Los Monegros han estado presentes a lo largo de los últimos 17 años ajedrecistas de talla mundial como Anatoly Karpov, Boris Sapssky, Francisco Vallejo, Veselin Topalov, Ljubomir Ljubojevic, Jam Timman, Miguel Illescas, Nigel Short, Rusian Ponomariov, David Antón, Yifan Hou, Anna Muzychuk, Vlastimil Hort, Judit Polgar o Sara Khadem.
Un elenco que este año ha continuado con unos invitados de honor, la familia hispano-sueca Cramling-Bellón, que se ha mostrado muy cercana, atenta y encantadora con sus seguidores y con el resto del público. La madre, Pía Cramling, excandidata al título mundial, se mantiene entre las mejores del mundo a los 61 años (ninguna otra tiene más de 40). El padre, Juan Manuel Bellón, de 74, aún en activo, es pentacampeón de España y un modelo de combatividad extrema. La hija Anna, de 22 años, es muy popular por sus retransmisiones en las redes sociales, donde la siguen más de un millón de personas, y cuenta con videos que suman trece millones de visualizaciones.
Es la primera vez que el Torneo Internacional de Ajedrez cuenta con tres invitados especiales, por lo que cada uno de ellos tenía que jugar contra diez personas a la vez. Finalmente, han sido 31 los jugadores a los que se han enfrentado y no 30, pues Pía Cramling ha accedido a jugar con una persona más al comenzar la partida un jugador de reserva. En total, la familia Cramling-Bellón ha vencido a 31 jugadores, diez de ellos pertenecientes a la Escuela de Ajedrez de Alcubierre.
Pía Cramling ha vencido a los once jugadores a los que se ha enfrentado de forma simultánea en una hora y 35 minutos; Juan Manuel Bellón ha logrado diez victorias en las diez partidas en un tiempo de una hora y 42 minutos, y el mismo resultado -diez de diez- se ha repetido en el caso de Anna Cramling con un tiempo de una hora y 54 minutos. Es decir, la familia Cramling-Bellón logró todo un pleno de victorias ayer por tarde en Alcubierre, con 31 partidas ganadas en menos de dos horas.
Pero por encima de los resultados, la familia ofreció una lección de ajedrez y de vida. Han sido los invitados especiales de la 17ª edición, celebrada durante todo el fin de semana en Alcubierre, una localidad que respira ajedrez y que se ha convertido en un referente internacional de este deporte. El gran evento se clausuró la misma tarde de ayer tras "un balance muy positivo" por parte de la organización.
