Agentes de la Policía Nacional, en el marco de los operativos realizados en el barrio del Perpetuo Socorro de Huesca de lucha contra el consumo y tráfico de sustancias estupefacientes, han detenido a un indigente y al hombre que lo utilizaba para traficar con drogas.  

Según han informado fuentes de la comisaría oscense, los hechos tuvieron lugar el pasado 11 de junio, cuando una patrulla detectó la actitud nerviosa de un indigente, que al ver a los policías se adentró corriendo en un bar ocultándose en uno de los sanitarios.

Tras interceptarle, le cachearon y le intervinieron 23 gramos de cocaína y más de 900 euros en billetes fraccionados que portaba escondidos en sus pliegues corporales y en las zapatillas. Durante la actuación, el detenido trató de destruir la droga intervenida, forcejeando y mostrando una gran agresividad con los agentes.

Durante la instrucción del atestado, la Policía Nacional averiguó que la sustancia estupefaciente se la había suministrado otro varón, que utilizaba al indigente para que realizara la venta directa de la droga, evitando así implicarse, según las mismas fuentes. 

Recientemente, la Policía Nacional desmanteló un punto de venta de drogas ubicado en una vivienda del mismo barrio del Perpetuo Socorro donde una madre y sus dos hijos se dedicaban a la venta de estupefacientes, actividad de la que habían hecho su modo de vida.

El Grupo de Estupefacientes de la comisaría oscense comprobó que a este domicilio acudían de forma constante personas para comprar pequeñas cantidades de distintos tipos de sustancias estupefacientes. De hecho, el rellano de dicho piso servía de narcosala, consumiendo los clientes de forma inmediata la droga que acababan de adquirir.

La familia incluso admitía objetos fruto de robos y delitos contra el patrimonio como pago por las sustancias que vendían. En el caso de una pequeña deuda llegaron a apuntar al cliente con un arma de fuego, sacando fotografías de su documentación y sustrayendo el vehículo con el que había acudido a proveerse de la droga.

Posteriormente, utilizaron esta información para falsificar la documentación necesaria, realizar un cambio de titularidad del vehículo y vendérselo a un tercero. Por estos hechos se les acusó también de delito de robo con violencia y falsedad documental.

Tras la investigación realizada, en la que colaboró la Jefatura Superior de Navarra, se realizó un registro en dicho domicilio, procediéndose a la detención de la madre y sus dos hijos por delito de tráfico de drogas. En dicha vivienda se aprehendieron 241 gramos de marihuana, así como efectos para preparar la dosis y 486 euros en dinero fraccionado. Tras pasar a disposición judicial, quedaron en libertad con cargos.

Dentro de la misma investigación, se interceptó también en el barrio del Perpetuo Socorro la llegada desde Reus de dos distribuidores, ambos con antecedentes varios por delito contra la salud pública.

Los mismos trataron de evitar la identificación policial adoptando diversas medidas tendentes a detectar una posible vigilancia policial. En su vehículo, con diversos huecos habilitados para ocultar la droga, transportaban 13 bloques de hachís con un peso de 1.282 gramos, así como 51 gramos de cocaína. Esta droga estaba destinada a abastecer a diversos compradores de dicho barrio. Tras pasar a disposición judicial, se decretó su ingreso en prisión provisional.