La emblemática cruz del Aneto ya 'descansa' en el Palacio de los Condes de Ribagorza, de Benasque, donde este viernes, 31 de mayo, el público podrá ver el resultado de los trabajos de restauración a los que ha sido sometida para reparar los numerosos desperfectos que había ido acumulando desde que fue colocada en 1951 en el techo de los Pirineos.

Debido a su envergadura (unos 3 metros de altura) y peso (alrededor de 100 kilos), la cruz ha tenido que ser transportada este jueves con la ayuda de un camión grúa desde el taller del herrero Miguel Ángel Plaza, ubicado en Villanova, hasta la localidad de Benasque, donde los vecinos la han recibido con expectación y mucha emoción. 

El alcalde, Manuel Mora, presidirá este viernes, a partir de las 19.00, la presentación de la cruz, que estará expuesta en el vestíbulo del Palacio de los Condes de Ribagorza para que vecinos y visitantes puedan comprobar su remozado aspecto y hacerse fotografías de recuerdo. 

Allí estará instalada de forma provisional hasta que las condiciones meteorológicas permitan devolverla de nuevo a la cima del Aneto con la ayuda del helicóptero de la Guardia Civil y guías de montaña locales. 

Debido a las duras inclemencias que había soportado durante más de 70 años y al mal uso que habían hecho muchos montañeros, la cruz presentaba daños. Hecha de chapa de aluminio remachada,  el mástil se llegó a partir. Además, tenía muchos bollos y se han sustituido las chapas rotas por unas nuevas y se ha repintado de color aluminio, intentando respetar al máximo su imagen original. 

El Ayuntamiento también se plantea colocar junto a la cruz la talla original de San Marcial -patrón de Benasque- que se subió en su día a la cima y que se tuvo que sustituir por una copia con una capillita al partirse los brazos de la figura. Y ha hecho un llamamiento para recopilar fotografías históricas de montañeros en la cruz que se expondrán también en el Palacio.