Bosal despedirá a 135 trabajadores de su planta de Pedrola tras perder un contrato con Volkswagen
La dirección del fabricante belga de tubos de escape ha comunicado hoy a la plantilla, unos días antes de que comenzasen sus vacaciones, este expediente de extinción de empleo.
Bosal, que fabrica tubos de escape, perdió recientemente el contrato de Volkswagen que garantizaba el 80% de la carga de trabajo. Este lunes la dirección de la empresa ha comunicado su intención de extinguir 135 puestos de trabajo, según ha informado la federación de Industria de CC. OO. Aragón.
Se abre ahora un plazo de siete días para constituir la comisión que negociará el expediente de extinción. Este es el único centro de trabajo que a la multinacional, con sede en Holanda, le queda en territorio español. La empresa todavía no ha aclarado qué ocurrirá con el 20% de la actividad restante, una producción que, en su momento, se consideró una apuesta de futuro, señalan desde este sindicato.
Ana Sánchez, secretaria general de Industria de CC. OO. Aragón, ha explicado que hace unos años empezaron una nueva línea de actividad para fabricar tubos de escape para camiones pero que es una parte muy pequeña de la producción. "Verbalmente la compañía le ha anunciado al comité el cierre de la planta, pero estamos a la espera de que les trasladen la memoria del ERE para saber porqué la multinacional ha decidido extinguir el contrato con Bosal antes de tiempo cuando no vencía hasta 2030".
Aunque el plazo para constituir la mesa negociadora del ERE termina el 22 de julio, Sánchez ha avanzado que no esperarán hasta ese día sino que quieren empezar a negociar cuanto antes este expediente. "No lo esperábamos ahora. Sabemos que fabrican tubos de escape pero quedaban unos años de contrato", ha precisado.
La dirección de Bosal ha comunicado la presentación de este ERE extintivo a pocos días de que que sus trabajadores iniciasen las vacaciones de verano. "Agosto suele ser un mes inhábil para la industria de la automoción", ha recordado Sánchez.
Desde UGT Aragón, el secretario general del Metal, Sergio Sancho, ha lamentado la "poca delicadeza de la dirección" al comunicar "esta malísima noticia" a pocos días de las vacaciones. "Según nos han trasladado nuestros delegados, la empresa les ha entregado una carta con el preaviso del ERE de extinción de contratos y cierre del centro de trabajo y les ha dicho a los del turno de mañana que podían irse a casa".
Les ha avanzado también la compañía, según Sancho, que eran 123 personas las afectadas por el ERE de extinción y que seguía habiendo trabajo para producir tubos de escape para vehículos pesados, pero que era poco y para menos de diez personas.
Esta industria auxiliar había atravesado en el pasado momentos muy complicados como cuando perdió la adjudicación del Corsa para Stellantis hace unos años. Entonces, tras meses difíciles de travesía por el desierto, entró Volkswagen para salvar la producción de tubos de escape en esta planta de Pedrola y se había convertido desde entonces en cliente mayoritario de Bosal.
"Estos últimos años ha habido problemas, pero se habían ido salvando y ahora totalmente por sorpresa nos encontramos con esto, precisamente cuando los últimos meses han sido de mucha actividad y a tres turnos", ha criticado Sergio Sancho. "Las formas dejan mucho que desear", ha reiterado porque "esto no es una decisión que se tome el día anterior, sino que el cierre inminente para los primeros días de septiembre, que han anunciado, llevarán tiempo decidiéndolo, ha reflexionado.
Desde UGT, ha dicho, y de forma conjunta con CC. OO. "tratarán de poder tener alternativas a esta grave pérdida de empleo y si no conseguir las mejores indemnizaciones" para los trabajadores.
CC. OO. Industria de Aragón está convencida de que el Observatorio del autómovil, recientemente creado en Aragón, debe ser sinónimo de transición justa. "Entiende que es el lugar donde deben tratarse casos como el de Bosal, para garantizar que la situación que atraviesa el sector no deje ningún cadáver laboral".
Este sindicato recuerda que es necesario abordar en este marco un proceso de reindustrialización al tratarse de una actividad con un futuro incierto por la transición hacia una movilidad más limpia.
"El empleo no es un juego"
Comisiones Obreras lamenta que la dirección de Bosal juegue con el empleo de los trabajadores y trabajadoras de la planta en Zaragoza y que comunique ahora, por sorpresa, una decisión que, seguramente, se cuajó hace meses. "La empresa cometió errores en el pasado que hoy tienen este resultado, como no alcanzar con Volkswagen un acuerdo sobre precios", señalan desde la central .
Recuerda el sindicato que hace más de una década que negocian con la empresa alternativas que permitan dar continuidad a la actividad de una empresa "en el ojo del huracán porque fabrica tubos de escape" que no necesita el coche eléctrico .
Durante la negociación del expediente que se ha presentado esta mañana, el sindicato tratará de revertir la situación que se ha generado. Si no fuera posible encontrar una alternativa, asegura que buscará las mejores indemnizaciones.
