Arantxa del Sol y Ángel Cristo JR fuman la pipa de la paz
Tras casi 80 días sin contacto, los ex concursantes de 'Supervivientes' han mantenido una larga conversación en la que no hay faltado las acusaciones mutuas.
Tras más de dos meses de tira y afloja y cuando ya nadie daba un duro por su reconciliación pública, Ángel Cristo y Arantxa del Sol, han enterrado el hacha de guerra y se han fundido en un abrazo con el que quieren correr un tupido velo para dejar a un lado la polémica que les persigue desde que ambos se vieron envueltos en un rifi-rafe con collejas e insultos a diestro y siniestro.
La magia de la televisión y un cheque al portador de parte del programa ¡Viernes¡, de Telecinco, han obrado el milagro de la reconciliación, algo que parecía imposible cuando la modelo vio entrar al hijo de Barbara Rey al mismo plató en el que ella se encontraba sentada. Una visita que la removió por dentro porque, según la modelo, el polémico concursante ha sido, según sus propias palabras, la persona que más le ha traicionado en el mundo de la televisión. Unas palabras a las que Ángel, contestó con que nunca fue su intención enemistarse con la presentadora.
"Estoy bastante confundido con muchas cosas y dolido por muchas cosas. Yo he venido aquí para aclararle a ella las dudas de lo que ha pasado, de lo que le han contado, y también para que ella me diga a mí qué le han contado y quién", argumentó Ángel , ante la acusación de Arantxa de malmeter en su matrimonio con el diestro Finito de Córdoba.
Aunque terminaron la conversación con muchas lágrimas y un sentido abrazo, lo cierto es que Arantxa aseguró que sigue sin creer en las verdaderas intenciones de Ángel Cristo y su mujer Ana Herminia. Es más, la televisiva modelo cree que todo formaba parte de un plan organizado por la pareja antes de comenzar el concurso.
Ante esta acusación, Ángel fue tajante y aseguró que todo ocurrió porque "se estaba dejando a mi mujer (Ana Herminia) de puta"
La desilusión de la pareja
Independientemente de la versión de cada uno, lo cierto es que al terminar el programa, Ángel y su mujer se fueron a casa en taxi totalmente derrotados. Al menos eso es lo que se desprende al ver la imágenes de la pareja llegando a su domicilio y asegurando a los cámaras que los seguían que "no venimos con ganas".
Tal vez, este estado anímico se deba a la demanda que le ha interpuesto su madre, Bárbara Rey, con la que lleva meses sin tener contacto y que asegura que el fruto de su relación con el domador "se aprovechó de la confianza para robarme los documentos".
Tras meses de guerra familiar entre Bárbara Rey y su hija Sofía Cristo, con Ángel, la vedette ha acudido a los juzgados por varios motivos: robo, injurias y calumnias.
De ahí se explica que el joven llegara a su casa con el semblante serio a pesar de que, se supone, había solucionado sus rencillas con Arantxa del Sol.
