Sociedad
Suscríbete

Mujeres: el reto de emprender

Cada vez son más las mujeres que se lanzan a emprender un proyecto profesional, una decisión arriesgada que también otorga múltiples beneficios y para la que exigen más formación.

El perfil de las nuevas empresarias ha ido evolucionando, cada vez son más las mujeres jóvenes, entre 18 y 44 años, que se lanzan a montar su propio negocio.
El perfil de las nuevas empresarias ha ido evolucionando, cada vez son más las mujeres jóvenes, entre 18 y 44 años, que se lanzan a montar su propio negocio.
Guillermo Mestre

Un cambio de vida, controlar su tiempo, poder tomar sus propias decisiones o cumplir un sueño son algunas de las razones que llevan a muchas mujeres a emprender un proyecto profesional. Cada vez son más y más jóvenes las mujeres que deciden tomar las riendas de su trabajo, así lo indica el análisis del Observatorio del Emprendimiento de España con datos del proyecto Global Entrepreneurship Monitor (GEM), que en el caso regional colabora con la Fundación Emprender Aragón y la Cátedra Emprender de la Universidad de Zaragoza.

Los ámbitos para iniciar un proyecto son numerosos desde agricultura, moda, alimentación, tecnología, innovación a bienestar, estética o salud. 

Emprender es comenzar una nueva forma de vida que supone enfrentarse a muchos retos. Sus protagonistas destacan la falta de conocimiento en el proceso de crear una empresa y su posterior gestión; también la excesiva burocracia a la que se enfrentan y las escasas ayudas económicas a las que poder acceder para ello.

Sin embargo, a pesar de ser una decisión complicada que también conlleva riesgos, defienden que supone tomar las riendas de sus decisiones y su tiempo y animan a hacerlo a aquellas que estén pensándolo.

Ayer sábado, 19 de noviembre, estas mujeres celebraban el Día Internacional de la Mujer Emprendedora, reconocido en 2014 por el Consejo de Naciones Unidas, con el objetivo de empoderar el emprendimiento femenino y su necesidad en la sociedad.

Aragón cuenta con un importante potencial femenino en lo que se refiere al emprendimiento. Una brecha de género que disminuye poco a poco en la Comunidad donde durante años han sido las mujeres las que han emprendido más que los hombres.

Arriesgarse, no tener miedo, intentarlo, luchar. Son algunas de las palabras o frases más repetidas por las emprendedoras aragonesas. Y no es para menos. Emprender supone dar un giro en sus vidas con el objetivo de cumplir un sueño y dejar su huella en el resto.

Se trata de un proceso difícil, pero "no podía morir sin intentarlo", confiesa Rosa Muñoz, que inauguraba hace unos meses la firma de ropa y complementos sostenibles Sinsen Moda. "Es dejar la posición más cómoda y empezar a depender de ti", cuenta Sara Perchés, emprendedora en la empresa de innovación óptica SmarThings4Vision y Centros Ópticos Soho. Algo que hace "que le dediques mucho más tiempo", añade la gerente de Asesoría Agrónoma, Yolanda Ferrer.

Un aspecto que también destaca positivamente la fisioterapeuta y osteópata turolense Inés Carrera: "Puedo decidir de qué manera hago mi trabajo y qué tratamientos aplicar a cada paciente", explica.

Sin embargo, la mayoría coinciden en una gran dificultad: el acceso a las ayudas económicas. "En mi caso no encajaba en los requisitos para solicitarlas" a pesar de llevar únicamente un año en el mercado, cuenta Pilar Letosa, emprendedora en la tienda de moda femenina y accesorios Desert Gros. "Nosotras empezamos antes de que hubiera tantas ayudas focalizadas al emprendimiento, por lo que ahora ya nos quedamos fuera", explica Ferrer.

Otra de las dificultades más comunes es la falta de formación a la hora de gestionar una empresa, una acción que en muchas ocasiones externalizan a una gestoría. "En mi caso, asistir a cursos del Instituto Aragonés de Fomento me ayudó mucho para lanzar el proyecto", cuenta la diseñadora.

Otro reto al que ha tenido que enfrentarse recientemente el fenómeno emprendedor es la covid-19. La pandemia ha supuesto una crisis en todos los sectores. Sin embargo, más de un 27% de los encuestados por el informe GEM consideran que la pandemia ha dado nuevas oportunidades de negocio que arrancarán en los próximos años.

Más mujeres

El perfil del emprendedor está cambiando. Cada vez son más las mujeres que se lanzan a liderar un proyecto profesional, según el último estudio de Global Entrepreneurship Monitor (GEM). El número de emprendedoras recientes en España -con un proyecto con menos de tres años y medio de vida- aumentaba un 5,6% en 2021. Además, según este informe, es cada vez mayor el porcentaje de mujeres jóvenes, entre 18 y 44 años.

Generalmente, el emprendimiento masculino siempre se ha situado por encima del femenino, una tendencia que en Aragón se invirtió en el año 2017, indica el informe regional en colaboración con la Fundación Aragón Emprende del Gobierno de Aragón. Los años posteriores las mujeres emprendían incluso más que los hombres, hasta que, en 2020 el emprendimiento masculino se convertía de nuevo en más numeroso, aunque las diferencias entre ambos no resultan excesivas. Los hombres se encuentran presentes en el 54% de las nuevas iniciativas y las mujeres en el 46%. 

"Es necesario dejarse ayudar"

La diseñadora de moda Rosa Muñoz decidió, tras la pandemia, que necesitaba un cambio en su vida después de más de 25 años dedicada al sector textil

Hasta ahora, Muñoz había trabajado como patronista para diferentes empresas, diseñado colecciones, participado en diferentes desfiles, hasta llegar el momento de "hacerlo para mí", cuenta. Recordó entonces unas palabras que le dijo su abuela, la cual falleció en 2021, y le animaron a emprender: "Sé feliz y cumple tus deseos, solo se vive una vez"

La diseñadora Rosa Muñoz trabaja en el sector textil desde hace 25 años.
La diseñadora Rosa Muñoz trabaja en el sector textil desde hace 25 años.
Anabel Pérez

A través de Sinsen Moda produce prendas femeninas a mano y de forma sostenible, con los restos de ellas trata de hacer fundas, monederos y diferentes accesorios. El objetivo de la soriana es crear ropa atemporal, de calidad y que aporte un "punto diferencial a cada mujer", explica.

La diseñadora confiesa que emprender es un proceso difícil, por lo que es necesario dejarse "asesorar y ayudar". Para ello destaca la formación, cursos y consultorías a través del Instituto Aragonés de Fomento.

"Tenía muy claro lo que quería"

Inés Carrera terminó el grado de Fisioterapia en el año 2015, cuando ya comenzó a trabajar de ello en una pequeña consulta en un local de estética. Después ha continuado formándose, finalizando este año la titulación de Osteopatía. "Tenía muy claro que quería tener una clínica", cuenta Carrera. En 2018, pudo emprender en su pueblo natal, Valderrobres, con la clínica ICM Fisioterapia y Osteopatía, en la que cuenta desde 2020 con una trabajadora más, servicio de psicología, consultas pediátricas y diferentes clases.

Inés Carrera fundó ICM Fisioterapia y Osteopatía hace cinco años en Valderrobres.
Inés Carrera fundó ICM Fisioterapia y Osteopatía hace cinco años en Valderrobres.
I.C.

"Me permite organizarme como quiero. Un día atender a más o menos clientes, dedicarle más horas, decidir qué tratamientos hago…", cuenta la turolense. "Lo que también tiene una responsabilidad: todo depende de ti", añade.

Se trata del proyecto con el que la joven había soñado, sin embargo, tiene un elevado coste que ha afrontado con la ayuda de su familia. "Pedí tres subvenciones, de las que no me ha llegado ninguna", lamenta la fisioterapeuta.

"Te permite tener tu propio espacio"

Hace tan solo un año comenzó la aventura de Desert Gros, una pequeña tienda de moda femenina y complementos inaugurada por dos jóvenes de Farlete, que cambiaba su ubicación al barrio de Vadorrey

Pilar Letosa y Marta Morales, amigas desde la infancia, conseguían cumplir un sueño juntas con el objetivo de ofrecer "prendas especiales y diferentes teniendo en cuenta el estilo que se lleva", explica Letosa. 

Pilar Letosa, en la nueva tienda de Desert Gros, en el barrio de Vadorrey.
Pilar Letosa, en la nueva tienda de Desert Gros, en el barrio de Vadorrey.
Guillermo Mestre

En esta nueva etapa del negocio, Letosa es la única responsable, lo que ha complicado su desarrollo en algunos aspectos: "He pasado de ser Sociedad Limitada a ser autónoma, que me ha dejado fuera de muchas ayudas", cuenta Letosa. 

El balance, tras su primer aniversario, es positivo: "Sigo con la tienda abierta", cuenta. Emprender ha permitido a la farletina tener sus propios horarios, conocer a mucha gente y tener su "pequeño espacio", añade. No es un proceso fácil pero, explica la joven, que también trabaja en un bar, hay que "arriesgarse y tener un objetivo claro".

"Hay que estar preparadas para el no"

Ana Lobato y Carolina Antona se conocieron en Jaca hace diez años, lugar donde han vivido su infancia, aunque ambas son de Zaragoza. Siempre habían tenido curiosidad por el mundo de los eventos, hasta que en el mes de septiembre consiguieron materializarlo a través de su propia empresa, Grupo Veintiséis.

A través de ella, las jóvenes organizan eventos gastronómicos, especialmente con productos aragoneses, para lo que cuentan ya con "algunos proyectos entre manos", añade Antona.

Ana Lobato y Carolina Antona, emprendedoras de Grupo Veintiséis.
Ana Lobato y Carolina Antona, emprendedoras de Grupo Veintiséis.
A.L.

Ambas tenían claro que el lugar para emprender era su ciudad natal, ya que "al ser una ciudad más pequeña es más fácil acceder al mercado", explican. Aunque también se han encontrado con dificultades, destacan que los principales problemas son "la excesiva burocracia y las pocas ayudas a las que acceder".

Sin embargo, esto no ha mermado la ilusión de las zaragozanas: "Hay que estar preparada para recibir muchos noes, pero luego, siempre hay gente que trata de ayudarte", añade Lobato. 

"Ser mujer no ha sido un impedimento"

La ingeniera agrónoma Yolanda Ferrer lanzaba en 2014 Asesoría Agrónoma para aconsejar e informar a explotaciones agrícolas y poner su actividad en valor, un sector con "cada vez más necesidades", cuenta Ferrer. A través de esta pequeña empresa realizan certificados de calidad, asesorías sobre administración o documentación a los agricultores. Además de Ferrer, la empresa esta formada por dos personas más en el puesto de ingeniera agrónoma y de administración.

La agricultura ha sido tradicionalmente una profesión en la que ha predominado la figura del hombre, algo que la agrónoma no siente que haya sido "un impedimento" para desarrollar su profesión.

Yolanda Ferrer emprendió en la asesoría del sector agrícola en 2014.
Yolanda Ferrer emprendió en la asesoría del sector agrícola en 2014.
Asesoría Agrónoma

El proyecto ha llevado a la oscense a convertirse en una de las finalistas de la VI GIRA Mujeres, un programa de formación y empoderamiento femenino de Coca-Cola que dará a conocer a su ganadora el 30 de noviembre.

La clave es "no rendirse, no todo sale bien desde el principio", anima la ingeniera a futuras emprendedoras.

"Volvería a elegir emprender"

Ana Lordán, tras una conversación con su padre en 2018, lanzó la marca Aceite Lordán, potenciando la agricultura de Estadilla (Huesca), lugar donde ha crecido, y sus olivos centenarios.

Lordán emprendió su proyecto con tan solo 21 años tras finalizar el grado de Administración y Dirección de Empresas en la Universidad de Zaragoza. A pesar de contar con la formación, gestionar un proyecto es difícil y es "imposible desconectar", añade la joven. Sin embargo, la ilusión de la oscense no cesa, "el balance es muy gratificante", cuenta.

Ana Lordán, fundadora de Aceites Lordán, junto a uno de sus productos.
Ana Lordán, fundadora de Aceites Lordán, junto a uno de sus productos.
A.L.

Una de las razones por las que Lordán decidió emprender fue por "la libertad de decisión, el poder gestionar mi tiempo y poder trabajar en el medio rural", explica la joven, que confiesa que si volviera al pasado "volvería a elegir emprender".

La formación es un elemento clave a la hora de poner en marcha un negocio. Por ello, la joven ha querido ayudar a ello y desde este curso participa como formadora en el programa ‘Emprender en la Escuela’ del Instituto Aragonés de Fomento.

"El negocio es parte de tu familia"

En 2016, los optometristas Sara Perchés y Fernando Palos y Jorge Ares, compañeros de Universidad y ahora socios, lanzaron SmarThings4Vision, seleccionada por el programa Spin Up de la Universidad de Zaragoza. A través de ella, buscan desarrollar instrumentos ópticos para graduar la visión o entrenarla, un sector en el que existe "poca innovación", explica la optometrista. Principalmente, distribuyen estos aparatos y servicios a hospitales u otras empresas del sector.

María Ciércoles y Sara Perchés, de Óptica Soho.
María Ciércoles y Sara Perchés, de Óptica Soho.
Guillermo Mestre

El emprendimiento es una experiencia que conlleva riesgos, pero Perchés confiesa que es "muy agradecido a nivel personal en todas sus fases". "Siempre cuentan la parte negativa, pero hay que quitarse el miedo y confiar", cuenta Perchés. Algo que le llevo a lanzar otro proyecto tras la pandemia, Centros Ópticos Soho, en el barrio de Miralbueno.

En cuanto a la conciliación, Perchés, madre de dos niños, cuenta que es algo más complicado porque el negocio también se convierte en "parte de tu familia y hay que hacer malabares con el tiempo".

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión