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El Colegio de Farmacéuticos de Zaragoza crea una bolsa para suplir guardias

Desde esta entidad apuntan que la dispensación en las farmacias, "además de acercar el medicamento, humanizar la atención y reducir riesgos".

Una mascarilla de muestra y desinfectante de manos en una farmacia de Zaragoza.
HA

El Colegio Oficial de Farmacéuticos de Zaragoza ha creado una bolsa de voluntarios para garantizar la continuidad de la atención a los pacientes de los servicios de guardia de las oficinas de farmacia de forma que si alguna se ve obligada al cierre temporal como consecuencia del coronavirus, se le pueda suplir.

Este organismo colegial ha explicado en una nota de prensa que la sustitución se realizará por la farmacia registrada en la bolsa que esté más cercana a la afectada, medida para "garantizar así la prestación farmacéutica". El colegio ha agradecido la colaboración de las farmacias que ya se han apuntado a la bolsa para asumir, "voluntaria y solidariamente", los servicios de guardia de las oficinas cerradas eventualmente por el coronavirus.

Por otro lado, la organización colegial de Zaragoza se ha sumado a la petición del Consejo General de Colegios Farmacéuticos y la Federación de Distribuidores Farmacéuticos para dispensar medicamentos hospitalarios a través de las farmacias.

Con esta propuesta, presentada a las autoridades sanitarias, se pretende reducir el riesgo de contagio del COVID-19 "entre los pacientes más vulnerables que durante esta crisis están teniendo que acudir al hospital para retirar los medicamentos de diagnóstico hospitalario", ha explicado esta organizacion.

De esta manera, gracias a los almacenes de distribución de medicamentos y a la extensa red de farmacias, miles de pacientes podrían recoger estos medicamentos en su farmacia más cercana, "reduciendo así el riesgo de contagio", han apuntado las citadas fuentes. 

Procedimiento

La propuesta pasa por facilitar a las farmacias comunitarias que dispensen aquellos medicamentos que actualmente se entregan en los hospitales, a coste cero, contando con la colaboración de las empresas de distribución farmacéutica y siguiendo las indicaciones que estimen las autoridades sanitarias.

En la actualidad, "muchos hospitales están aconsejando que no se acuda a los mismos y han reducido las visitas para la retirada de los medicamentos por el peligro que supone", han esgrimido desde el Colegio de Farmacéuticos de Zaragoza.

Han añadido que la dispensación en las farmacias, "además de acercar el medicamento, humanizar la atención y reducir riesgos, evitaría otros problemas asociados en el escenario excepcional que vivimos como puede ser abandono de los tratamientos". Además, se aseguraría el seguimiento de los tratamientos y la dispensación por parte de un profesional sanitario como es el farmacéutico.

Evitar desplazamientos

La presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Zaragoza, Raquel García, ha recordado que "con la red de 830 farmacias que tenemos distribuidas en toda Aragón y el escenario que estamos viviendo, tiene menos sentido que nunca que se obligue a los pacientes a ir a los hospitales por estos medicamentos".

También ha precisado que, con esta medida, los pacientes que viven en los pueblos podrían acceder a estos medicamentos en las farmacias rurales, "sin necesidad de desplazarse varios kilómetros hasta el hospital más cercano".

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