Francia frena a la extrema derecha
La movilización de los partidos de izquierda, agrupados en la coalición Nuevo Frente Nacional, y la formación del presidente Emmanuel Macron, se impusieron ayer en la segunda vuelta de las elecciones legislativas francesas al partido de Marine Le Pen, Agrupación Nacional. Con estos resultados, la extrema derecha queda relegada a la tercera posición, después de que en la primera vuelta se convirtiera en la formación más votada. Contra el pronóstico fijado en las encuestas, el frente de izquierdas, gracias a una alta participación, logró ayer la victoria en unos comicios que no esconden la profunda división política que afecta a Francia
Vuelco y sorpresa sobre los sondeos. La segunda vuelta de las elecciones francesas relegó ayer a la extrema derecha a la tercera posición de estas legislativas, confirmando el éxito del "cordón republicano" solicitado por Macron. La victoria de la coalición de izquierdas del Nuevo Frente Nacional queda lejos de la mayoría absoluta, abriéndose un complicado periodo de negociaciones en el que los macronistas habrán de jugar un papel destacado. Pese a la rápida solicitud del líder de la izquierda radical, Jean-Luc Mélenchon, de que el futuro primer ministro proceda de la alianza de la izquierda, quedan intensas semanas por delante hasta resolver la pregunta de quién gobernará. Los resultados, en cualquier caso, conceden tiempo a Macron, quien a la espera de las próximas presidenciales debe enfrentarse ahora a la formación de un gobierno que habrá de dar respuesta a los muchos problemas que afectan a la país. Sin que ninguna de las tres formaciones con mayor número de escaños quede cerca de la mayoría absoluta, Francia, referencia indiscutible en el proyecto europeo, decidió ayer frenar a la extrema derecha
