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Cartas al director de HERALDO: El drama de la despoblación

Lusera
El drama de la despoblación
Rafael Gobantes

El drama de la despoblación

Uno de los principales factores que ha contribuido a la despoblación en Aragón es la emigración de jóvenes a otras regiones en busca de oportunidades económicas y educativas. Otro factor es el envejecimiento de la población. 

A medida que las personas mayores se quedan sin familiares cercanos y amigos, muchas veces se ven obligados a mudarse a ciudades o pueblos más grandes donde pueden recibir atención médica y social. La despoblación también ha tenido un impacto significativo en la economía, especialmente en las zonas rurales. Ha llevado a una disminución en el número de empresas y negocios locales, lo que ha afectado negativamente la economía de la región. Además, la despoblación ha tenido un impacto en la calidad de vida de las personas en las zonas rurales, ya que muchos servicios y comodidades básicas, como el transporte público y la atención médica, se han vuelto cada vez más escasos. Para abordar el problema de la despoblación en Aragón, se han implementado varias medidas. Por ejemplo, se han creado programas de ayuda para fomentar la creación de empresas y empleos en zonas rurales y se han establecido incentivos fiscales para atraer a las empresas. También se han implementado programas para mejorar la calidad de vida de las personas mayores y para fomentar la inmigración de personas jóvenes y cualificadas. Pero todavía queda mucho por hacer para garantizar un futuro sostenible para la región. Es importante que las autoridades sigan trabajando en soluciones a largo plazo para abordar la despoblación y garantizar un futuro próspero para Aragón y sus habitantes.

Agustín Sancho Cubero. ZARAGOZA

España va como un cohete… para los ricos y los políticos

La afirmación de que "España va como un cohete" se basa en la macroeconomía, que recoge los grandes datos económicos globales de un país (fundamentalmente los de grandes empresas, Ibex, datos económicos nacionales, etc.). Además, los que han aumentado exponencialmente son los millonarios (en España y en el mundo). Ya se sabe, el dinero llama al dinero. Pero los datos de ir por casa (los domésticos): nóminas de trabajadores y funcionarios, cesta de la compra, gastos en electricidad, teléfono, gasoil, etc., individuales, esos no son datos macroeconómicos sino individuales, de cada uno, caseros. Y aquí se gripa el cohete. Si se añaden los datos de riesgo de pobreza (uno de cada cuatro de los residentes en España), riesgo de pobreza infantil (uno de cada tres niños), inflación y coste de la vida, incremento del coste de la cesta de la compra sobre todo en alimentación (no hace falta ni hablar sobre esto), pérdida de poder adquisitivo en los últimos años a pesar de los incrementos del salario mínimo y las múltiples subvenciones sociales existentes, parece que el único que va como un cohete en España es el Falcon. Los demás vamos en un 600.

Teófilo Almazán Lahoz. MUNIESA (TERUEL)

Después del derrumbe

Me gustaría conocer la responsabilidad de la Administración en el derrumbes de edificios. Puesto que es el organismo que concede o niega las licencias para la construcción. No puede ser que unas personas que han perdidos sus viviendas estén desamparadas, sin sus enseres ni posibilidad económica de rehacer su vida en una nueva vivienda. Sin ayuda de la Administración. Se supone que los ciudadanos pagamos impuestos y tasas que nos indican por cada servicio recibido. No tiene que ser cuestión de recaudación para que los políticos se garanticen su nómina a final de mes. Parte de los impuestos recaudados tendría que repercutir en beneficio de la ciudadanía, mejora de las infraestructuras, servicios, atención al ciudadano.

Pascual Enrique Gimeno García. ZARAGOZA

Gobierno o circo

La actuación de los personajes que componen el actual Gobierno, en el Congreso y en el propio Consejo de Ministros, más parecen un espectáculo circense que algo serio. Una vicepresidenta, Montero, parece una fan quinceañera cada vez que el presidente habla. Debe de tener callos en las manos de tanto aplaudir. Luego tenemos a un ministro, Puente, que en vez de atajar los errores de su departamento, Transportes, se dedica a tuitear descalificando a cualquiera que se le ocurre. Dejemos de lado al de Interior, criticado por casi todas las asociaciones de policías y guardias civiles, a los que tiene en franca inferioridad frente a las redes de contrabando. Tenemos a algunas ministras de las que casi se desconocen sus competencias y que solo salen a la palestra a repetir la consigna diaria del partido. Y anda con la segunda vicepresidenta, Yolanda Díaz, que está, no está, va, viene... Y por encima de todos, el presidente del Gobierno, que se ausenta del Congreso tantas veces como se debate o aprueba la ley de amnistía. Será por vergüenza de sus mentiras. En fin, se dice que un país tiene los gobernantes que se merece. Puede que sí. O a espabilar, que ya es tarde.

Isabelino Martín González. ZARAGOZA

Amnistía y ¿normalización?

No soy experto en Derecho, aunque tuve que estudiar conceptos generales de Constitucional y Administrativo. Leo en el BOE: «Ley Orgánica 1/2024, de 10 de junio, de amnistía para la normalización institucional, política y social en Cataluña». Comienzan las dudas. ¿Qué, quiénes o qué causas motivaron tal falta de normalización institucional, política y social en Cataluña? ¿Hay responsables? Recuerdo las manifestaciones, las ‘leyes de desconexión’, la declaración de independencia y, sobre todo, la actuación posterior de la Justicia y las condenas a los responsables según la ley. Me cuesta trabajo seguir leyendo el preámbulo de la ley, repaso el título y me fijo en lo último, «en Cataluña», y se me caen los palos del sombrajo. Se ha redactado una ley orgánica ¡para una región!, no para toda España. Ítem más, al siguiente día de la entrada en vigor constatamos cómo es la normalidad a que se refiere la ley viendo cómo en la elección de presidente del Parlamento catalán se saltan las normas del Tribunal Constitucional. Abandono la lectura de este lío y me voy a pasear.

Luciano Ibáñez Dobón. ZARAGOZA

Las cartas al director no deben exceder de 20 líneas (1.500 caracteres) y han de incluir la identificación completa del autor (nombre, apellidos, DNI, dirección y teléfono). HERALDO se reserva el derecho de extractarlas y publicarlas debidamente firmadas. cartas@heraldo.es

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