El Gobierno central ha publicado por fin la convocatoria de ayudas a iniciativas de producción de baterías del vehículo eléctrico del Proyecto Estratégico de Recuperación y Transformación Económica (Perte) VEC III, dotado con 300 millones de euros y al que concurrirá el grupo Stellantis para intentar llevar adelante su proyecto de construcción de una gigafactoría junto a su planta de Figueruelas. 

La adjudicación de estos fondos es fundamental para que Aragón pueda mantener, con el coche eléctrico, su privilegiada posición internacional dentro de la industria de la automoción y, al mismo tiempo, alcanzar los objetivos climáticos.

Los 300 millones de euros destinados a proyectos de producción de baterías, dentro del tercer paquete de fondos europeos para la transición de la automoción hacia los coches enchufables, son una prioridad para Stellantis, ya que de momento su iniciativa solo ha recibido 55,86 millones, una cantidad considerada insuficiente. La compañía espera un volumen financiero del mismo orden que los recibidos, para proyectos similares, por Volkswagen en Sagunto (Valencia) y por la firma china Envision en Navalmoral de la Mata (Cáceres), que ha sido de 300 millones.

El lograr por fin esta línea de financiación es un reto tanto para Stellantis, como para la industria auxiliar aragonesa y, en general, para la Comunidad porque el éxito en la carrera por implantar el coche eléctrico está estrechamente ligado a la inversión en la construcción de fábricas de celdas. El futuro de la industria automotriz tanto en España como en el resto de Europa pasa por los vehículos de cero emisiones. Aragón tiene que estar en el centro de este futuro de movilidad sostenible.