El Teatro Principal de Zaragoza se pone guapo para celebrar sus 225 años

Contrata un equipo de sonido, nuevas tapicerías para las sillas de los palcos, una cámara negra y cuatro carteleras digitales

Un monumental andamio permite pintar todo el interior del teatro
Un monumental andamio permite pintar todo el interior del teatro
Guillermo Mestre

El Teatro Principal de Zaragoza está aprovechando el verano para ponerse guapo de cara a la celebración de su 225º aniversario, que se prolongará hasta final de 2025. El interior del coliseo está actualmente en obras, algunas de las cuales pueden apreciarse directamente desde la calle, como la sustitución del suelo del zaguán, ya prácticamente completada. Otras, sin embargo, no se ven. En los últimos días se han retirado las tablas del escenario para instalar un monumental andamio. Ello permite renovar la pintura del frontal del escenario, embocadura, palcos y estuco veneciano de la planta baja, tareas en las que se está trabajando y que no se realizaban desde hace décadas.

Pero hay mucho más. Desde que el pasado domingo 14 de julio se ofreció la última función de ‘Totally Tina’ se empezó a trabajar a toda velocidad en las mejoras. En total, se van a invertir 590.000 euros con el objetivo de que cuando empiece la temporada 2024-2025 el próximo 5 de septiembre el coliseo estrene imagen y esté en perfectas condiciones.

Algunas de las mejoras, sin embargo, no estarán terminadas, sino que se tendrá que trabajar en ellas a lo largo de la temporada. Es el caso del nuevo equipo de sonido, que sustituirá al de 1991, ya maltrecho y cuyas averías empiezan a constituir un auténtico problema porque no se encuentran ya repuestos adecuados. Desde finales de 2022 funciona con un ‘apaño’ precario y la amenaza constante de averiarse definitivamente. Se busca "un equipo de indiscutible calidad que pueda cubrir las necesidades de entre el 80 y el 90% de las compañías que exhiben sus producciones en nuestra sala". El presupuesto máximo de licitación es de 265.000 euros, IVA incluido.

Una de las mejoras reivindicadas desde hace tiempo por el público zaragozano es la instalación de un ascensor para el público que facilite el acceso a las plantas altas del edificio. Con un presupuesto de 200.000 euros, se empezará a trabajar en su instalación la próxima semana. Se espera que entre en funcionamiento en otoño, al igual que un novedoso servicio de guardarropía, que hasta ahora no se ofertaba y que, para mayor comodidad del visitante, empezará a ofrecerse entre los meses de noviembre y abril.

Otra de las mejoras que ha salido a contratación es la compra de una nueva cámara negra (el conjunto de cortinajes oscuros que se emplean para delimitar la escena y para ocultar al espectador los elementos que no debe ver). La actual fue adquirida hace 20 años y su uso intensivo ha hecho que las telas estén ajadas o remendadas, que presenten humedades e incluso que se hayan vuelto en parte traslúcidas y no absorban bien la luz. El presupuesto máximo de licitación es de 42.000 euros, IVA incluido.

También está previsto sustituir los respaldos de la tapicería de 250 sillas de los palcos del teatro. Se trata de sillas de Loscertales cuyas fundas acolchadas para el respaldo presentan ya notables heridas y deterioros. El presupuesto previsto es de casi 30.000 euros, IVA incluido.

Y, por último, ha salido a concurso la compra de cuatro carteleras digitales para la fachada del coliseo, en sustitución de las actuales. Con ello se le va a ‘cambiar la cara’ al teatro. El precio de las cuatro es de 47.000 euros.

Otras acciones que se están acometiendo son la adecuación del palco de control técnico, la instalación de una cámara de circuito cerrado con grabación continua en el hall, la renovación integral de las taquillas de la calle de Don Jaime y diversos trabajos de carpintería, sonido e iluminación.

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