'Perseidas’ es el título del espectáculo que presentó la Pirotecnia Oscense en el reciente y prestigioso Concurso Internacional de Fuegos Artificiales de San Fermín, en las fiestas de Pamplona, y que fue reconocido con el tercer premio en las votaciones del público. El primero se lo llevó el diseñador danés Gunnar Boerge Knudsen con ‘La magia de la noche’; y el segundo, el neerlandés Roeland Weijenburg con ‘Valentía a toda velocidad’.

En la votación profesional, realizada por un jurado cualificado, el San Fermín de Oro, dotado con 5.000 euros, fue también para el danés Gunnar Boerge Knudsen, que ya se había llegado el primer premio en 2018; el de Plata (3.000) recayó en el británico Karl Mitchell-Shead; y el de Bronce (2.000) se lo llevó al neerlandés Roeland Weijenburg.

El concurso volvió a ser uno de los actos más multitudinarios de San Fermín con 410.000 espectadores. La ciudadanía emitió 3.650 votos (2.892 en ‘www.sanferminespamplona.es’ y 758 en papel en el Civivox Condestable y la Oficina de Turismo), un 53% más que en la edición del año pasado.

La colección de Pirotecnia Oscense, empresa fundada hace más de 45 años por Gonzalo Hernández y Javier Martínez Gavín, se lanzó desde la Ciudadela el 9 de julio. Los hermanos Jesús y Javier Martínez recrearon las llamadas lágrimas de San Lorenzo, patrón de Huesca, o lluvia de estrellas.

El XXIII Concurso Internacional de Fuegos Artificiales de San Fermín contó con la participación de nueve diseñadores, tres de ellos de España (Valencia, Huesca y León) y los otros seis de Dinamarca, Francia, Países Bajos, Reino Unido e Italia.

Todas las colecciones debían tener una duración mínima de 13 minutos y cumplir dos pruebas obligatorias: una creación rítmica usando los sonidos de los tiros en el suelo con los colores sanfermineros, blanco y rojo; y un disparo asimétrico, diferente a cada lado. Cada una tenía un presupuesto base de 22.566 euros, hasta superar los 200.000 en total.

"La gente aplaudió mucho"

"Estamos muy contentos con el premio porque el público aplaudió mucho ese día. Preparamos un espectáculo diseñado especialmente para San Fermín y se agradece que te reconozcan el trabajo cuando sale bien", admite Javier Martínez.

Era la tercera participación de la Pirotecnia Oscense en el concurso, además de otras dos veces en las que acudieron para dar apoyo a dos participantes italianos. Y aseguran que un certamen de esta categoría supone un premio de "mucho prestigio". "Es uno de los mejores de España junto con Bilbao, San Sebastián o Tarragona. Luego Valencia ya es caso aparte porque esa es la cuna de la pólvora", destaca. Este año también les llamaron de Valladolid, pero tuvieron que declinar la invitación por exceso de trabajo.

Pirotecnia Oscense

Actualmente están en "pretemporada" y la agenda de espectáculos comenzará a apretarse este fin de semana con las fiestas de Sabiñánigo o Grañén. Calcula que en todo el verano pueden llegar a unos 60 disparos pirotécnicos, aparte de los toros de fuego que también fabrican. "Hay semanas que tenemos todos los días uno, dos, tres y hasta cuatro espectáculos", afirma. En esta época, la plantilla de ocho trabajadores de incrementa para atender esta demanda de pedidos "aunque es difícil encontrar personal ya que tienen que tener el carnet especial", subraya.

Escaso presupuesto en Huesca

Sus principales zonas de trabajo son Aragón, Lérida y Navarra. Javier Martínez aguarda con especial emoción su participación en las Fiestas de San Lorenzo, donde realizan cada año una diana de bombas reales, dos espectáculos de fuegos artificiales y la traca final. No obstante, lamenta que "no se reconozca más la labor de la Pirotecnia Oscense en ‘casa’ porque tenemos unos presupuestos muy ajustados y nos gustaría mostrar en Huesca espectáculos acordes a una capital de provincia, porque los que hacemos en Sabiñánigo, Barbastro o Grañén son más grandes".