Ocio y Cultura

El Drogas y Carlos Tarque protagonizan la fiesta del rock en Pirineos Sur

La octava jornada del festival llevó al escenario flotante de Lanuza a dos pesos pesados de la música española. 

El Drogas, en su actuación en Pirineos Sur.
Jaime Oriz

Carlos Tarque y El Drogas ofrecieron la noche más rockera de Pirineos Sur este jueves 18 de julio. Son de las figuras más reconocidas del género en este país y ambos han escrito algunos de los capítulos más importantes con sus respectivas bandas: M-Clan y Barricada. Pero si algo demostraron en tierras oscenses es que viven del presente, que están en plena forma y que pocos artistas del momento son capaces de desatar una tormenta de guitarras como la que se cernió en el pantano de Lanuza.

A Carlos Tarque siempre se le ha considerado como uno de los mejores vocalistas de su generación. Eel planteamiento de su concierto discurrió por esos cauces: entre el hard rock de los 80 y el southern rock de los 70. Igualmente de bien se desenvuelve.

Acompañado de La Compañía del Rifle, una banda rock que suena como un cañón, fueron desgranando sus dos discos en solitario: 'Bombas en son de paz', 'Heartbreaker', 'Días extraños', 'Mar de whisky'... Llamó la atención de todas las versiones que podría haber hecho es que recurriera a 'Helter skelter' de The Beatles. Aunque por la energía de la original y ese espíritu desafiante, le sentó como un guante.

Dejó para el final tres trallazos que aún retumban bajo la Foratata: 'Ahora y en la hora', 'He vuelto para haceros arder' y 'Donde nace el rock and roll'; esta última como toda una oda a una música y a una actitud de vida, con guiño incluido a uno de los padres del invento: Led Zeppelin.

Y con esa actitud, con el rock and roll como forma de vida, salió El Drogas; cuál viejo pirata curtido en mil escenarios. Se encuentra en plena de gira de 40 aniversario, y el setlist se centró en los grandes éxitos que ha firmado con Barricada: canciones que con el pasar de los años se han convertido en la banda sonora de varias generaciones.

Con una formación clásica de bajo, batería y bajo se bastó para sonar como apisonadora. Secos, crudos, directos. Rock and roll. 'La silla eléctrica' y 'Esperando en billar' marcaron ese rumbo a seguir y de ahí el cuarteto no se apartó. Casi sin respiro hizo un repaso al repertorio más inspirado de Barricada, con un Drogas pletórico, en perfecto estado de voz y con la misma mala leche que siempre. Continúa escupiendo canciones a la cara, como puños: 'Okupación', 'Víctima', 'La hora del carnaval'... El último tramo fue de infarto, con algunas de las canciones más importantes que se han escrito en castellano: 'Balas blancas', 'No hay tregua', 'Esta es una noche de rock and roll'. Pero aún hubo tiempo para más sorpresas, cuando Tarque se unió a cantar con la banda 'Frío'. 'Blanco y negro', esperadísima, sonó como un trueno en Lanuza cerrando una gran noche guitarras.