Ocio y Cultura

La Fundación Lacus celebra entre risas y lágrimas su gala benéfica en Zaragoza

El presidente del patronato, Fernando Gasca, anuncia la disolución de la entidad por las
dificultades económicas y los escasos apoyos.

Los protagonistas de la última gala benéfica de la Fundación Lacus, en el Teatro de las Esquinas
Oliver Duch

El pulso de la Fundación Lacus Aragón, que promueve valores de inclusión para la integración real de las personas con discapacidad y necesidades específicas, sigue latiendo a pesar de que este miércoles se hizo púbico que después de 16 años de trabajo cesará su actividad cuando termine este curso. Así lo anunció el presidente del patronato de la Fundación Lacus Aragón, Fernando Gasca, en la XIV Gala Benéfica de esta entidad, y aunque muchos asistentes conocían la noticia, un poso de tristeza sobrevoló sobre el patio de butacas del Teatro de las Esquinas.

La presentación corrió a cargo del ‘showman’ y músico Luis Cebrián, que protagonizó varios momentos emotivos. El primero, al recordar que el triste anuncio "nos va a hacer llorar a todos un poco, pero emocionarse y recordar el gran trabajo de estos años es algo maravilloso". Tras estas palabras, invitó a su compañera Julia González Andrés a subir al escenario y mano a mano celebraron estos 14 años de trabajo junto a más protagonistas.

Los primeros agradecimientos fueron para Ringo Válvulas, el patrocinador principal, y para los colaboradores Nature Clean, Mimelo Estudio Creativo y el área de políticas sociales del Ayuntamiento de Zaragoza. También fueron reconocidas Sara Andrés Pallás, por los cinco años de trabajo en Lacus, e Isabel Pemán y Elena Arroyo, que llevan 10 años en la fundación.

Seguidamente, se entregaron las distinciones de 2023. En concreto, al Colegio Internacional Ánfora, que recibió su directora Esther Sánchez. Esta entidad ha llevado a cabo numerosas iniciativas de sensibilización, formación, difusión y captación de recursos para Lacus.

La segunda fue para Elena Montesa en reconocimiento al trabajo desarrollado en favor de las personas con discapacidad intelectual y de sus familias. Y, por último, para la Fundación La Caixa "por la labor que esta entidad viene realizando desde hace más de un siglo para ofrecer oportunidades de tener una vida mejor a las personas que más lo necesitan". Recogió el premio Josep Ollé, director del departamento de Coordinación Territorial de esta fundación.

A continuación intervino Fernando Gasca para agradecer "el trabajo y el apoyo de tantas personas y entidades que han estado a nuestro lado. Pero con todo el dolor de corazón –prosiguió– os decimos que este largo camino comienza a tocar a su fin. Este será el último acto formal que organizamos porque, al finalizar este curso escolar, y tras varios intentos para que no fuese así, la Fundación Lacus comenzará un proceso de liquidación. Las pérdidas económicas y los escasos apoyos recibidos nos han hecho ser realistas y tomar esta decisión", concluyó.

Fernando comentó que a final de año habrá una fiesta de despedida y la gala continuó con un premio especial para el consultor empresarial y deportivo, Javier Gómez, que anunció el presentador Luis Cebrián. Sin embargo, la sorpresa se la llevó el humorista al comprobar que no era Javier Gómez el homenajeado, sino él mismo. El escenario se llenó de amigos suyos que le entregaron uno de los reconocimientos más emotivos de la velada. Allí estaban el actor Jaime Ocaña y el humorista Rafa Maza, y compañeros de los grupos La Banda del Flaco y Cretino&Cretiners. Se emocionó, pero pudo continuar con la gala.

Finalmente, el momento mágico de la noche lo puso el mago Mario Cobretti, y el colofón llegó de la mano de la soprano Elaine de Valero y de la Orquesta de la Escuela Municipal de Música y Danza de Zaragoza