La crispación tiñe un 12-O con abucheos al presidente y gritos de "Que te vote 'Txapote'"
Sánchez acusa al PP de "alentar" los insultos contra él y Feijóo ironiza con que si su rival está de "broma" cuando señala a los populares.
Se cumplió el guion, una vez más, en el desfile militar del 12 de octubre celebrado hoy en las calles de Madrid. El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, tal y como preveían en la Moncloa, recibió una atronadora pitada y numerosas proclamas en su contra por parte de los miles de asistentes que abarrotaron el centro de la capital durante el acto de las Fuerzas Armadas.
El Ejecutivo era consciente de que el clima de tensión de los anteriores años podía incluso incrementarse como consecuencia de las negociaciones del líder del PSOE con Junts y ERC sobre una posible amnistía para amarrar la investidura. Y eso fue precisamente lo que ocurrió. El cambio de ubicación del palco de autoridades -antes se situaba cerca del estadio Santiago Bernabéu y se levantó en la plaza de Neptuno- no impidió, como sucede desde 2018, escuchar improperios y consignas contra el jefe del Gobierno en funciones. "Fuera", "ladrón" o "dimisión" fueron los gritos más repetidos a su llegada a la tribuna presidencial. El público más cercano se situó a una distancia superior a los 200 metros tras el cambio de itinerario, que la ministra de Defensa, Margarita Robles, atribuyó a las obras en la Castellana. Pero incluso al final del desfile, y mientras Sánchez departía con los Reyes, se volvieron a escuchar gritos de 'Puigdemont, a prisión', el ya citado de 'Sánchez dimisión' e insultos al secretario general del PSOE.
Aunque hubo un eslogan crítico que destacó por encima del resto y que hasta ahora Sánchez no había tenido que escuchar en ningún 12 de octubre, aunque sí lo lleva sufriendo desde que un detractor suyo lo exclamase en una retransmisión de TVE este enero-: el "¡Que te vote 'Txapote'!" fue entonado en varios momentos del acto solemne en un clima de alta tensión contra Sánchez. El dirigente socialista, al igual que hiciese la última semana al intentar endosar a Génova los posibles abucheos- achacó esa crispación al PP más tarde, durante los habituales corrillos en la recepción ofrecida por los Reyes en el Palacio Real tras el desfile.
El hoy candidato a la reelección sostiene que Génova trata de "calentar la calle" aludiendo a los actos contra la amnistía en los que ha participado el PP el último mes. También acusa de "intentar apropiarse de los símbolos comunes" tanto a los de Alberto Núñez Feijóo como a la extrema derecha. "Lo grave", enfatizó el presidente en su charla informal con los periodistas es que "los insultos" o el 'Que te vote 'Txapote' los profieran "dirigentes del PP y Vox". Y remató con que los pitidos se producen "siempre que hay un presidente de Gobierno socialista", obviando otros episodios similares padecidos por sus predecesores del PP.
Preguntado por la reacción de su rival en los mismos corrillos, Feijóo ironizó con si éste estaba de "broma". El presidente del PP se escudó en que los abucheos "son un clásico en este acto", aunque admitió que "quizá esta vez han sido un poco más", al tiempo que afeó al líder socialista "hablar de respeto a las instituciones y luego no ser capaz de respetar al primer partido de España". Un respeto que el líder de los populares vino a revindicar con la exhibición de su recuperado poderío territorial tras las elecciones del 28-M: de los 15 presidentes autonómicos que asistieron a los actos de este 12 de octubre, 11 pertenecen a su partido, por tres del PSOE y uno de una formación nacionalista, Fernando Clavijo, de Coalición Canaria. El lehendakari Iñigo Urkullu y Pere Aragonès, president de la Generalitat, no acudieron como viene siendo ya costumbre en los soberanistas vascos y catalanes.
La fórmula escogida por parte del público para zaherir a Sánchez sí molestó a víctimas del terrorismo como Consuelo Ordoñez, presidenta de Covite y hermana del político del PP asesinado por ETA Gregorio Ordóñez-, quien criticó con dureza a los que siguen recurriendo a la figura de 'Txapote' como ariete para denunciar los pactos del presidente con Bildu y envió una nítida indirecta: "Pero qué vamos a esperar con el ejemplo que reciben de algunos de sus líderes". Ordóñez ya recriminó meses atrás a Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, que empleara esa misma expresión.