El primer Consejo de Política Federal del nuevo PSOE liderado por Pedro Sánchez, que ha sido dirigido por la presidenta de Andalucía, Susana Díaz y en el que han estado presentes un total de 17 barones socialistas, se ha resuelto con la aprobación de la denominada 'Declaración de Zaragoza'. 

El encuentro se ha celebrado en el palacio de La Aljafería de Zaragoza y ha derivado en el planteamiento del PSOE de iniciar un "proceso de participación" en el marco de la Comisión Constitucional del Congreso, en el que expertos, representantes de instituciones y dirigentes autonómicos delimiten una reforma de la Carta Magna. 

La intención del grupo es convertir España en un Estado Federal y en ello van a centrar fundamentalmente los esfuerzos de la posible renovación que proponen al Gobierno de Mariano Rajoy.

"El PSOE no plantea la reforma constitucional como una ruptura del modelo territorial, sino como una revisión de los defectos que han ido surgiendo en los 36 años de democracia", ha asegurado Sánchez, señalando además que "la reforma se llevaría a cabo a través de un gran pacto ciudadano, con el consenso de todos los partidos políticos y la esperanza de lograr una España mejor en todos los aspectos". 

Para el líder socialista, "es posible salir de la falta de avance y de la negativa a abrir un nuevo tiempo en la política que evidencia el Gobierno actual", considerando que Mariano Rajoy es un dirigente "resignado que no tiene voluntad para afrontar desafíos como el de la crisis de Cataluña, que es un problema que afecta a toda España".

Según ha indicado, el reto de conducir una regeneración política "no llega como respuesta al independentismo catalán", advirtiendo que "el PSOE es un partido federal desde hace mucho tiempo y que no solo la encrucijada histórica que vive el país ha sido el detonante de querer modificar la Constitución". 

El proceso consistiría en "abrir una subcomisión dentro de la propia comisión constitucional para concretar la reforma de la Carta Magna y avanzar hacia un modelo federal a través desde el dialogo entre todas las fuerzas políticas".

Además, "se abarcarían aspectos como la regeneración y modernización de la democracia, con medidas como la limitación a dos los mandatos del presidente del Gobierno, y cambios en la financiación de los partidos políticos". 

No marca plazos

Sánchez se ha mostrado reacio ante la posibilidad de fijar fechas en la creación del proceso de participación. "En primer lugar esperamos un cambio de posición por parte del PP, que en su día se negó a considerar las propuestas de la anterior Ejecutiva liderada por Pérez Rubalcaba", ha comentado, considerando además que "la Declaración de Granada es una de las mejores herencias recogidas por nuestro equipo de gobierno", reconociendo "el gran trabajo llevado a cabo en años anteriores".  

Por ello, ha insistido en que "habrá que esperar a la respuesta del presidente, para después poder hablar de plazos", con el convencimiento de que "ahora lo importante es presentar propuestas ante los problemas que afloran en el país". 

Respuesta a Cospedal

La secretaria general del Partido Popular, María Dolores de Cospedal, ha asegurado, en respuesta a las recientes propuestas socialistas, que "cualquier intento de cambiar nuestra Constitución que vaya en contra de la soberanía nacional, de la unidad de España o de la igualdad absoluta de todos los españoles va a tener enfrente al PP".

La popular ha acusado a Sánchez y su equipo de querer "dinamitar" las reglas del juego a través de la crisis política catalana, advirtiendo que no van a permitir que nadie "divida a España".

El líder del PSOE ha respondido diciendo que "ella no es la persona más indicada para hablar de las directrices a seguir en política terrritorial, tras haber llevado a cabo una reforma unilateral en Castilla-La Mancha". 

Además, Sánchez ha destacado que no se trata de "dinamitar" las reglas del juego, sino de tratar de encontrar que es lo más conveniente en cada momento.

Podemos y el candado del 78

"Al señor Pablo Iglesias, decirle que la España que tenemos es la mejor de nuestra historia, tras haber recogido los frutos de, entre otras cosas, pertenecer a la Unión Europea o ser partícipes de la democracia", ha advertido el socialista en referencia a las críticas vertidas hacia la Carta Magna del líder de Podemos, señalando que "el país que se construyó entre todos en el 78 ha traído libertad y democracia, algo que no quiere decir que la Constitución no tenga que ser reformada". 

Por ello, "el PSOE quiere preservar los logros alcanzados a partir de 1978, poniendo en valor el acuerdo constitucional vigente y buscando qué formas de mejorarlo existen".