Internacional

Hombres armados matan a cuatro personas y secuestran a 150 en el noroeste de Nigeria

También han resultado heridas 25 personas a causa del ataque ocurrido el domingo en la aldea de Dan Musa, en la localidad de Kaura Namoda.

Imagen de archivo de la Facultad de Ciencias del Gobierno en Kagara, Nigeria, en la que hombre armados secuestraron a estudiantes y personal.
EFE

Al menos cuatro personas fueron asesinadas y 150 secuestradas, incluyendo dos bebés, en un ataque perpetrado por hombres armados en el noroeste de Nigeria, en el estado de Zamfara, confirmó a EFE este miércoles una organización de la sociedad civil.

El ataque se produjo el pasado domingo en la aldea de Dan Musa, en la localidad de Kaura Namoda, confirmó a EFE por teléfono Attahiru Mohammed, secretario de la Coalición de la Sociedad Civil de Zamfara (ZASCON).

"Los pistoleros, que circulaban en más de 100 motocicletas, secuestraron también a unos 150 vecinos, incluyendo a dos bebés de menos de ocho meses", detalló Mohammed.

"No hemos sabido nada desde que los bandidos se llevaron a los aldeanos al bosque. Nadie ha sido contactado para el pago de un rescate", añadió.

Los atacantes, que también robaron ganado, abrieron fuego de manera indiscriminada, lo que dejó al menos 25 personas heridas.

Según el secretario de la Zascon, "muchos vecinos han huido por miedo a nuevos ataques".

"No sabemos cuándo terminarán las matanzas en nuestro estado", lamentó, al instar al Gobierno y a las fuerzas de seguridad a combatir el bandidaje y otras formas de criminalidad en la zona.

En declaraciones a medios locales, un testigo llamado Aminu Bello Dan Isa explicó que "algunas mujeres que lograron escapar retornaron con piernas rotas y varias heridas, tras ser apaleadas por los bandidos".

EFE trató de contactar con la Policía de Zamfara para confirmar los hechos pero no obtuvo respuesta.

En algunos estados del centro y noroeste de Nigeria son constantes los ataques de "bandidos", como se conoce en el país a los grupos armados que realizan secuestros y robos y a los que las autoridades tildan en ocasiones de "terroristas".

Los asaltos continúan pese a las repetidas promesas de terminar con la violencia por parte del Gobierno nigeriano, que ha reforzado el despliegue de sus fuerzas de seguridad.