El autor del ataque a puñaladas contra un grupo de ultraderechistas en la localidad de Mannheim es un refugiado afgano de 25 años identificado como Suleiman A., según revelan este sábado varios medios alemanes. 

El hombre no ha podido ser interrogado aún para conocer los motivos de la agresión, aunque se presume un trasfondo islamista, ya que se recupera aún de la herida de bala sufrida tras ser abatido por un policía y haber sido sometido una operación posterior. Por otra parte, un agente que resultó gravemente herido durante el ataque se encuentra en coma inducido y estado crítico, según los médicos que le atienden, quienes destacaron que el policía recibió varias puñaladas en la cabeza y el cuello.

La agresión se produjo en la mañana de este viernes en la céntrica plaza del mercado de Mannheim, cuando varios militantes de la organización ultraderechista e islamofóbica Pax Europa se disponían a celebrar un acto político. Armado con un cuchillo de combate de grandes dimensiones, Suleiman A. atacó en primer lugar a Michael Stürzenberger, un dirigente de Pax Europa, al que propinó varias puñaladas en una pierna, el torso y la cabeza. Varias personas, entre ellos policías que vigilaban el acto del grupo ultraderechista, intentaron entonces detener la agresión y resultaron también heridas por la puñaladas que repartía a diestro y siniestro el atacante, que no se detuvo ni cuando cayó al suelo.

"Ayer (por el viernes) me libré por los pelos. Una de las puñaladas al costado en el pecho no alcanzó el pulmón por poco", comenta Stürzenberger, de 59 años, en un mensaje en las redes sociales enviado desde el hospital este sábado, en el que destaca que sufrió una herida en la cara con daños en la boca y la mandíbula y una gran herida en la pierna que afectó a la arteria femoral.

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La Policía confirmó además que la vivienda del sospechoso fue registrada este sábado por los agentes encargados del caso. Suleiman A., que procede al parecer de la localidad afgana de Herat, llegó a Alemania de adolescente como refugiado en 2014 y se encuentra casado con una ciudadana alemana con la que ha tenido dos hijos y reside en Heppenheim, una localidad al sur del Estado federado de Hesse.

"Lo que más nos interesa averiguar ahora son los motivos del ataque", señalaron fuentes de la investigación del caso. Estas explicaron que fueron seis las personas heridas en la agresión, todas participantes en el acto de Pax Europa salvo el policía.

Las imágenes del ataque, vídeos y fotografías, que circulan en redes sociales muestran a un atacante desbocado y furibundo que apuñala a toda persona que se pone a su alcance. La agresión ha causado gran conmoción en Alemania. El canciller federal, Olaf Scholz, afirmó en un mensaje a través de la plataforma X que "las imágenes de Mannheim son terribles", expresó sus condolencias y deseos de pronta recuperación a los heridos y sus familias y subrayó que "la violencia es absolutamente inaceptable en nuestra democracia. El autor debe ser castigado con toda la severidad de la ley".

"Condeno enérgicamente el crimen de Mannheim", señaló a su vez el presidente de Alemania, Frank Walter Steinmeier, quien advirtió de que "la violencia destruye nuestra democracia" y afirmó que "la libertad de expresión es un bien valioso".

El alcalde de Mannheim, el cristianodemócrata Christian Specht, señaló que el ataque fue un atentado y declaró que "en nombre de la ciudad de Mannheim y su sociedad condeno enérgicamente este brutal y cobarde ataque terrorista dentro del marco de un acto crítico con el islam".