Salad Boutique, 5 años vendiendo ensaladas de medio kilo en el Actur y la clientela responde

Andrei y Diana Hristache han consolidado en el Actur un 'negocio verde' que ahora se abre a gimnasios y eventos.

Andrei y Diana con las tres elaboraciones que ofrecen: wrap, tostada y ensalada.
Andrei y Diana con las tres elaboraciones que ofrecen: wrap, tostada y ensalada.
Alejandro Toquero

¿Es posible vivir de un negocio dedicado a la elaboración de ensaladas para llevar y para comer en el local? Pues sí, lo es, y Andrei y Diana Hristache lo han demostrado en el barrio del Actur de Zaragoza, en el número 37 de la calle Gertrudis Gómez de Avellaneda, donde el 17 de julio se cumplen cinco años desde que abrieron al público las puertas de su espacio verde.

“Cada vez se producen más aperturas de establecimientos 'fast food' como hamburgueserías o pizzerías, pero de comida sana y saludable como la nuestra no hay tantos, y aunque parezca lo contrario, mucha gente se está animando a comer así”.

De esta forma explica Andrei que su modelo de negocio no haya sido flor de un día. Y eso que los inicios no fueron sencillos. Seis meses después de abrir, sin casi tiempo para darse a conocer, llegó la pandemia; luego una obra en el edificio que le restó visibilidad al local y problemas de licencias y burocracia. “Los tres primeros años fueron muy complicados”, reconoce esta pareja.

Preparando varias ensaladas en Salad Boutique
Preparando varias ensaladas en Salad Boutique
Alejandro Toquero

Sin embargo, en los dos últimos han ido viendo la luz, “el boca oído ha funcionado y la clientela se ha dado cuenta de que nuestras ensaladas son una buena alternativa para una comida de calidad a un precio razonable”, prosiguen.

Diana considera que buena parte del éxito reside “en unos ingredientes que son muy frescos. “La compra grande la hacemos en Mercazaragoza un par de veces por semana y luego nos movemos por toda España para encontrar verduras como el kale, que nos está resultando difícil conseguir en Zaragoza de forma regular, o bebidas como kombucha”.

En Salad Boutique, cada cliente se puede elaborar su propia ensalada.
En Salad Boutique, cada cliente se puede elaborar su propia ensalada.
Alejandro Toquero

También creen que ha calado la idea de que con sus ensaladas se puede resolver una comida o una cena. Todas responden al mismo perfil, y sí, son un plato único contundente. Cada una pesa entre 500 y 600 gramos. “Cuesta terminarlas”, explican. “Casi todo el mundo se las acaba, pero si no es así, se la llevan a casa para cenar o para el día siguiente”.

Su concepto de ensalada es amplio. Las hay más verdes y otras menos, aunque en todas la base vegetal es importante. En la actualidad, ofrecen 36 que llevan ingredientes fijos y cada una tiene su nombre, “pero entre todos los productos que hay en el mostrador, cada cliente puede elegir los que quiera y hacérsela a su manera”.

Las elaboraciones se pueden comer en el local o para llevar.
Las elaboraciones se pueden comer en el local o para llevar.
A. T.

Andrei explica que la más popular es la Roma, que lleva pasta integral, brócoli, tomate y espinacas. Además, es una de las que mejor admite diferentes aliños. Porque sí, en Salad Boutique los aliños son tan importantes como los productos utilizados. “Tenemos 15 y todos son caseros; la Roma, por ejemplo, combina muy bien con los de pesto, picante, mostaza y olivada negra”. Para elaborar este último, Andrei utiliza aceitunas del Bajo Aragón y las limpia una a una. “Es el que más me cuesta”, comenta.

El ranking de las más populares continúa con la oriental (cous cous, kale, pollo, tomate cherry, huevo duro y manzana). En este caso el aliño recomendado es el caesar. Por último, está la que da nombre al local, Salad Boutique. Todas llevan seis ingredientes pero a esta le añaden uno más (arroz integral, mézclum, atún, tomate cherry, aguacate, olivas verdes y nueces), ideal para mezclar con la olivada negra.

La clientela la reciben, sobre todo, de oficinas de la zona del Actur.
La clientela la reciben, sobre todo, de oficinas de la zona del Actur.
A. T.

En este tiempo, Diana y Andrei están contentos de que su local se haya dado a conocer más allá del Actur, donde entre las oficinas y negocios de la zona tienen a su principal clientela. “Pero cada vez notamos que viene más gente de otros barrios e incluso turistas”, prosiguen. Además, han conseguido que se hagan hueco en un gimnasio con cafetería y también trabajan el catering y eventos.

Andrei y Diana con las tres elaboraciones que ofrecen: wrap, tostada y ensalada.
Andrei y Diana con las tres elaboraciones que ofrecen: wrap, tostada y ensalada.
A. T.

Pero no solo de ensaladas vive Salad Boutique. En su carta hay tostadas y wraps. Estos últimos son parecidos a las ensaladas, pero los cuatro ingredientes que llevan se envuelven en tortillas de espinacas y tomate. Luego están las cremas calientes en invierno y el gazpacho en verano. Por supuesto, todo casero. Sin olvidar los postres, que responden a este mismo perfil: mousse de mango y maracuyá, tiramisú, tarta de queso, yogur griego con chía o granola…

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