gastronomía
Una ruta de tapas y cócteles al calor de Zaragoza Florece
El Parque Grande José Antonio Labordeta es el centro neurálgico del evento, aunque el festival se extiende por bares y restaurantes de toda la ciudad.
Este fin de semana se celebra Zaragoza Florece, el festival que desde hace cuatro primaveras brilla en el Parque Grande José Antonio Labordeta. Cada año las flores y las actividades han cobrado más protagonismo, no solo en este espacio, considerado el 'pulmón verde' de la ciudad, sino en las calles y establecimientos de otros barrios.
Gastroflorece es una muestra de ello. Desde la semana pasada cuarenta bares y restaurantes participan en este certamen que busca realzar la presencia de las flores en las recetas de platos y cócteles, siendo algo más que una decoración. También brindan textura y sabor. Se pueden encontrar en desayunos, brunch, menús, cócteles, postres
Por ejemplo, el día se puede empezar en Nati Natillas, en el barrio de Valdespartera, donde las tortitas se presentan decoradas con flores comestibles. Para aquellos que prefieran otra opción pueden acercarse a La Almozara para probar 'Spring Bowl', de Extrem, que es una refrescante combinación de yogur, frutas y granola, lo que encaja en un brunch primaveral.
Con vistas a la basílica del Pilar se presenta 'Avocado Flower' de Matisse River Café, una tostada de guacamole y huevo poché adornada con pétalos. A este bocado salado se suma 'Flor del desierto', de Flor de Lis de la calle de Don Jaime I, que es una tentadora masa frita rellena de mousse de chocolate y frutas.
Las gildas son sinónimo de la hora del vermú y también se visten de flores en Mazmorra by Macera, al igual que 'Marpy Bao de Pulpo', un pan asiático con una combinación de mar y montaña. La Clandestina, en la calle de San Jorge, ofrece un tartar de atún Balfego, mientras que el Restaurante Aragonia -del hotel Palafox- apuesta por una creación de lomo de atún rojo de la Bahía de Cádiz con pil- pil tostado de salsa española, pimientos del piquillo de Aragón, yema de corral marinada y té de flores.
También por los derroteros marineros nada la propuesta de El Sardi, que es una base de Salmorejo, carpacho de bacalao ahumado, huevo picado y pétalos de caléndula. Moss se lanza con 'Fiori di zucca', una receta italiana que incluye flor de calabacín o pizzas con detalles florales de Pizza Mía y Leone Pizzería -recientemente galardonada como la mejor pizza de Aragón-.
La Rinconada de Lorenzo también participa, con unos pimientos rellenos de rape y gambas con salsa marinera y pétalos de flores, y la propuesta de Tik Tak es un viaje a la Costa Esmeralda, en el norte de Cerdeña, donde saborear una burrata italiana sobre un tomate Marazul a la parrilla, cebolla de fuentes y pesto casero.
Zaragoza Florece también llega a las estrechas calles del Tubo con la participación de casi una veintena de locales. La Ternasca ofrece 'Flores de Colores' -un fondo de flores de colores como un campo y encima una costilla de ternasco asada a baja temperatura- y la Terraza Libertad apuesta por una maceta de patata. El Meli del Tubo sorprende con una tisana en flor, un vermú con tinto de verano con nube artesanal de cítricos acompañado de flor natural.
Las flores llegan a la copa
Como ya se ha mencionado, las propuestas florales también se encuentran en cócteles. Los macerados con flores de Mazmorra puede ser una combinación perfecta para los amantes de las ginebras. También Fruit & flowers, la propuesta de la terraza Nusa Dua, que se trata de un cóctel con fresas, ginebra y un toque de cítrico, acompañado de una esponjosa nube con forma de flor.
Mai Tai pone sobre la mesa una picante opción: Spicy Mariachi es un cóctel con tequila con Té Oolong, Licor Frangelico, cordial de Chocolate blanco y mandarina, cítricos asiáticos y el toque más spicy con Ancho Reyes Licor. El Taller Clandestino, en cambio, se decanta por el ron. El equipo de Jimmy Valios propone un viaje al caribe con su De-Ma-Coco. Matisse propone Strawberry Sour Vodka, un cóctel macerado con frambuesa, zumo de limón, ágave y clara de huevo.
A todos ellos se suman los sorbos de Lily Cream, el cóctel de Nómada Street Food -en la plaza de San Francisco-. Este cóctel está diseñado para ser "una experiencia sensorial completa", tal y como lo definen. Se trata de una perfecta combinación de ginebra, sirope de mango, sirope de jazmín, Italicus y sirope de cereza, con un toque de blue curaçao. Se corona con una fina y delicada capa de espuma de leche de coco y frutos de la pasión.