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Tercer Milenio

En colaboración con ITA

El diseño aragonés que interviene en todo: Trufas, mantecados, un sillín y servicios de neurotecnología

Un centro que depende del Gobierno de Aragón impulsa un programa de innovación que se extiende en pymes de distintos sectores.

Mari Carmen Royo y César Grasa, del obrador Lattidos, en Mediana de Aragón.
Mari Carmen Royo y César Grasa, del obrador Lattidos, en Mediana de Aragón.
Lattidos

César Grasa, técnico aeronáutico y recortador profesional, no había pensado nunca que algún día tomaría las riendas del negocio familiar, un obrador artesano ubicado en Mediana de Aragón. El fallecimiento hace cuatro años de su padre, un panadero que se dedicaba en cuerpo y alma a la elaboración de mantecados de avellana y otros productos, le hizo unirse a su madre (Mari Carmen Royo) para relanzar Lattidos, su establecimiento, con un nuevo impulso. Yen ello está desde entonces, por eso esta micropyme participó en 2023 en la primera edición del programa Laboratorio de Diseño Industrial y Digitalización que impulsa el CADI.

«El obrador lo puso en marcha mi abuelo en 1952 y desde entonces las cosas han cambiado, hay que adaptarse a los retos actuales de la sociedad, a los nuevos sistemas de venta», señala César Grasa para explicar la decisión de unirse a la iniciativa del CADI. «Participar en el programa nos ayudó a crear una visión para conseguir que nuestra marca pueda proyectarse más», apunta. «Además de crear un producto más excepcional, hay que transmitir un mensaje más claro a los clientes», remata.

Con el asesoramiento de Línea Diseño, Lattidos ha creado un producto/idea con el que pueda ampliar su actividad a través de su página web y con él difundirá mejor–si lo pone en marcha– los valores de la marca.

Similar a ese proyecto es el de MyTruff, impulsado por productores de trufa de Teruel que quieren mejorar la experiencia de sus potenciales clientes. Creada como empresa hace cinco años por Ricardo Forcadell y Cosme Martínez a partir de una plantación trufera, MyTruff lleva ya tres años recolectando y vendiendo el producto al por menor y al por mayor a nivel internacional. En el programa de diseño del CADI han sido asesorados por Thinkers Co, cuyos profesionales –indica Forcadell– «nos mostraron caminos y formas de hacer las cosas con los que no estábamos acostumbrados en la operativa de venta de las trufas».

Mejorar la estrategia de venta, precisamente, con un empleo idóneo de los canales digitales, es uno de los objetivos que se ha planteado MyTruff al participar en la iniciativa del CADI.

En este caso estaba claro que el trabajo debía consistir en mejorar el diseño del servicio, ya que el producto es la propia trufa. Consciente de ello, Juan Gasca, de Thinkers Co, realizó con ellos un análisis de su competencia (un ‘benchmarking’) sabiendo que hasta ahora MyTruff tenía su propia operativa en internet de B2B (‘business to business’, negocio con empresas) y algo de B2C (‘business to consumer’, negocio hacia el cliente final). Estos productores de trufa ya tenían cierto reconocimiento nacional e incluso internacional después de haber participado en Madrid Fusión el año pasado y en eventos en Nueva York, además de otros actos promocionales.

MyTruff participó en un evento de selección de trufa en la James Bear Foundation, en Nueva York.
MyTruff participó en un evento de selección de trufa en la James Bear Foundation, en Nueva York.
MyTruff

«Construimos una visión con ellos de cómo montar su B2C», señala Gasca, que para todo el trabajo ha debido tener en cuenta que la trufa es un producto de temporada y que hay oscilaciones en sus precios. Elaborar todo el proceso comercial que podría impulsarse de cara el futuro ha centrado el trabajo realizado por la empresa con el asesoramiento de los expertos en diseño.

Thinkers Co ha sido también el estudio de diseño que ha trabajado con Eboca, empresa de Huesca especializada en máquinas de ‘vending’ que también participó en la primera edición del Laboratorio de Diseño Industrial y Digitalización. Juan Gasca trabajó en ese caso para ayudarles a mejorar la experiencia de cliente digital. «Ellos querían mejorar su propuesta de valor, trascender en la relación que ahora tienen con sus clientes a través de la digitalización», reseña. Eboca lo que busca, y así lo ha hecho saber desde hace años con actuaciones muy diversas, quiere ser algo más que un vendedor de máquinas de café, incluida la que funciona con hidrógeno.

El programa del Centro Aragonés de Diseño Industrial (CADI) tiene el objetivo de que pequeñas y medianas empresas de la Comunidad reflexionen sobre el valor del diseño, tanto el de producto comoel de servicios, como una herramienta estratégica que impulse su actividad a través de la innovación. La idea es que participen pymes que en otras circunstancias normales no lo habrían hecho, pero que tienen la inquietud de apostar por nuevas formas de trabajar.

Bitbrain y Podoactiva

El departamento de Economía del Gobierno de Aragón, del que depende el CADI, celebró en mayo pasado una jornada para promocionar este servicio de innovación empresarial y en el mismo se conocieron dos casos de éxito de la edición de 2023. Uno de ellos es de Bitbrain, empresa de neurotecnología de Zaragoza que combina neurociencia, inteligencia artificial y hardware para desarrollar productos innovadores, y el otro la oscense Podoactiva, firma especializada en podología.

En el caso de Bitbrain se trataba del impulso de un servicio digital para la mejora congnitiva basado en neurotecnología. Una herramienta que ya ha sido implantada y para la que la empresa contó con el asesoramiento de la consultora zaragozana Fractal, que propugna la transformación de las empresas sobre la base del diseño.

En el caso de Podoactiva, el proyecto con el que participó en el programa –a través de su Instituto de Investigación en Ortopedia Avanzada– fue el del diseño de un sillín de bicicleta personalizado, que está en proceso de prototipado.

Según explica Mariano Bazco, profesional de Línea Diseño que trabajó en esta iniciativa, la idea era explorar qué posibilidades había de incorporar la digitalización a un sillín de bicicleta utilizando paneles sensoriales que permitieran monitorizar a tiempo real cómo se está utilizando. Eso puede permitir mejorar la postura del ciclista y conseguir que su rendimiento en la bicicleta.

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