Economía
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Moneva busca dos personas que se muden al pueblo para llevar el bar y las piscinas

Los gestores anteriores eran un matrimonio de Barcelona que tuvieron que dejar el pueblo, de unos 120 habitantes, por cuestiones familiares, para volver a su tierra

Interior del bar de Moneva, que espera recuperar las tapas
Interior del bar de Moneva, que espera recuperar las tapas
H. A.

Moneva es un pueblo de unos 120 habitantes censados de la comarca de Campo de Belchite donde el bar es mucho más que un lugar donde servir comida y bebida. Es el centro de reunión, es un dinamizador social y contribuye a que la localidad tenga más vida. Su alcalde, Luis Martín, lo tiene claro y, por ese motivo, desde la entidad a la que representa se dan todas las facilidades posibles para que alguien se haga cargo de este negocio.

Los gestores anteriores eran un matrimonio de Barcelona que tuvieron que dejar Moneva por cuestiones familiares, para volver a su tierra. Desde entonces, hace unos meses, los dos alguaciles del Ayuntamiento se hacen cargo del bar, pero se trata de un servicio de mínimos. “Se limitan a poner bebidas y poco más, por no cerrar”, explica Martín. Para solucionar cuanto antes esta situación transitoria, desde el Ayuntamiento se ha hecho un llamamiento en busca de una pareja que quiera mudarse al pueblo y hacerse cargo del bar de la plaza y también de las piscinas, que tienen su propio bar.

El único requisito que se pide a nivel profesional es que ambas personas tengan conocimientos de cocina porque en el bar se sirven tapas y raciones a la hora de vermú, y también porque muchas cuadrillas de amigos encargan comidas y cenas en este establecimiento. Para que la oferta sea más atractiva, tanto los gastos de mantenimiento del bar como el suministro de agua, luz y calefacción corren a cargo del Consistorio, que es además el propietario del local, del que no cobra tampoco alquiler.

Luis Martín, alcalde de Moneva: “El bar en un pueblo es elemental para la vida social. Un Ayuntamiento no puede mirar el beneficio económico que da, sino por el social, porque es algo que retiene a la gente”

Además, el Ayuntamiento de Moneva dispone de una casa de dos plantas, destinada antiguamente a los maestros. Ahora, esta vivienda se ofrece a los interesados en el puesto de trabajo. “Tiene planta baja con cocina y salón comedor y en la primera hay dos dormitorios y un baño. Está amueblada y con electrodomésticos, tiene calefacción de pellet y aire acondicionado”, explica Martín. El precio de vivir en ella es un alquiler simbólico de 200 euros al mes, que va ligado al contrato de gestión del bar, que es por un año, renovable.

El plazo para recibir solicitudes finaliza este martes, y hasta la fecha ya se han interesado en la oferta más de 350 personas. El anuncio se ha difundido tanto en portales de anuncios online como en la comarca y en redes sociales y la previsión es que el próximo 3 de mayo, en el pleno municipal, se elija entre los candidatos. “El bar en un pueblo es elemental para la vida social. Un Ayuntamiento no puede mirar el beneficio económico que da, sino por el social, porque es algo que retiene a la gente”, asegura Martín. El edil lleva 20 años en el mandato y desde hace “muchos” -no recuerda cuántos- no se cobra alquiler por el local, ni tampoco los gastos. “En pueblos tan pequeños hay meses que apenas se saca beneficio, por eso hay que echar una mano a los que cogen el negocio”, añade.

Desde hace un tiempo, además, en el mismo bar es donde se venden productos básicos de alimentación y otros no perecederos. Anteriormente, se prestaba este servicio en una tienda multiservicio pero ahora este local está en desuso. El médico y la farmacia hace tiempo que no prestan servicio en Moneva, cuyos vecinos se desplazan a Azuara, Moyuela o Zaragoza, en casos de mayor gravedad. 

“En los años 30 o 40 aquí vivían 800 personas, pero con el tiempo la gente se ha ido yendo a donde hay trabajo”

“En los años 30 o 40 aquí vivían 800 personas, pero con el tiempo la gente se ha ido yendo a donde hay trabajo”, reflexiona Martín. En su pueblo la principal fuente de negocio es la agricultura de secano y ahora se acaba de anunciar la construcción de un parque de placas solares que, durante un año, dará empleo a 120 personas. “Estos trabajadores serán también clientes potenciales del bar y, además, el Ayuntamiento dispone de otra vivienda para el responsable de la obra, si la necesitara”, explica el alcalde.

Las obras de acondicionamiento de esta antigua casa de los maestros se han llevado a cabo en la última legislatura, de donde se han sacado dos viviendas con vistas a dotar a Moneva de sitios donde vivir para los nuevos pobladores. En este sentido, entre los planes que tiene el Ayuntamiento a corto plazo está crear un mercado inmobiliario que facilite los arrendamientos y ventas y contrarreste el problema de escasez de vivienda en el medio rural. Además, recientemente, el Consistorio ha ejecutado una balsa de agua potable de 11.000 metros cúbicos. “Con el problema de sequía que hay ahora, en este pueblo no le va a faltar agua a nadie”, defiende Martín. Al mismo tiempo, se está trabajando en conectar el pozo del que antiguamente se abastecía la localidad con un depósito verde para suministrar agua en caso de necesidad. “Sería, por ejemplo, para dar de beber al ganado”, puntualiza.

“Este no es un pueblo que se abandona. La gente se va a trabajar fuera pero mantiene sus casas y siempre hay dos o tres equipos trabajando en el pueblo arreglando viviendas”

Por el momento, el reto a corto plazo para el consistorio monevino es elegir a la pareja ideal para que tome las riendas del bar y las piscinas, servicios imprescindibles para Moneva especialmente en los meses de verano. “Este no es un pueblo que se abandona. La gente se va a trabajar fuera pero mantiene sus casas y siempre hay dos o tres equipos trabajando en el pueblo arreglando viviendas”, asegura su alcalde, que solo tiene buenas palabras para la gente joven. “Se implican mucho en todo lo que hacemos y hay unas 15 peñas con cerca de 20 personas cada una”, añade.

Así, aunque entre semana y en invierno Luis Martín no quiera ni contar cuántos vecinos viven realmente en el pueblo, los fines de semana, puentes y meses de verano, el ambiente en la localidad no tiene nada que ver. “Organizamos muchas cosas para atraer a la gente, desde un trail como el Campeonato de Aragón de Perros de Detección, que se va a celebrar aquí dentro de poco”, explica, sobre unos eventos que, con facilidad, llevan a entre 150 y 200 personas hasta Moneva.

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