El Huesca estrena su casillero de victorias con un convincente 3-0 ante el Ibiza
Kevin Carlos abrió el marcador en la primera parte y Mateu, de penalti, y Kante remataron la faena en la segunda.
La Sociedad Deportiva Huesca ya sabe lo que es ganar. A la cuarta fue la vencida para los azulgranas que tras un buen empate a cero con el Levante en el inicio de la liga, habían sufrido dos derrotas -ambas con un gol en el último minuto- que habían levantado dudas. La suficiencia con la que se deshicieron del Ibiza, un conjunto que como ellos solo tenía un punto en el haber, y que se fue de El Alcoraz con un justo 3-0 en contra, reafirma el trabajo que Cuco Ziganda viene realizando. La versión que ofreció el equipo es la más redonda vista hasta la fecha, la que mejor ha plasmado los postulados que el técnico está inculcando en el vestuario. El triunfo, además, evita caer en la zona de descenso, lo que podría haber generado prematuras exigencias cuando la competición aún transita por la cuarta jornada.
Kevin Carlos, en el día en que estrenaba titularidad, abrió también su cuenta goleadora para adelantar a los locales al cuarto de hora. Ya en la segunda parte, Mateu forzó y marcó el penalti con el que se aumentaron las distancias y asistió a Kante para confirmar que los tres puntos se quedaban en El Alcoraz, donde la afición aplaudió satisfecha a los suyos.
La presencia del delantero no fue la única novedad en el once que propuso Ziganda. Sin Jorge Pulido, sancionado, y con Anglada quedándose en la grada tras su estreno con la selección española sub-19,hubo que apostar por una nueva pareja de centrales. Fue la que se esperaba a tenor de lo visto en los entrenamientos de los días previos, Timor y Blasco. El primero retrasó su posición y el segundo debutó en partido oficial. Ambos resultaron convincentes. El hueco que había quedado en el centro del campo junto a Kento fue para Tomeo, que regresó así tras su ausencia en el 2-1 de Albacete y fue uno de los más destacados. El de Alloza continúa creciendo y devolviendo con buen hacer la confianza que le ha otorgado el entrenador. En líneas generales fue una buena actuación coral en la que el sistema defensivo funcionó a la perfección y en el que el equipo fue punzante arriba. El rival, muy tierno, ayudó.
A excepción de en el inicio del segundo acto, el Huesca estuvo cómodo durante todo el choque. Con las líneas juntas, concentrado, cerrando espacios y llevando al rival dónde quería. También, con el viento a favor de verse pronto por delante en el marcador. Solo gozó de un 33% de la posesión, cifra que resulta escasa para un conjunto local, pero tampoco necesitó más. Dejó que el Ibiza manosease el balón todo lo que quiso, porque fue incapaz de hacer daño con él. O lo acorraló en las bandas o lo forzó a rifarlo con pases en largo a los que los azulgranas estuvieron atentos.
Aunque en los dos primeros minutos del choque el Huesca tuvo un conato de empujar a los baleares a su portería con Kento realizando el primer tiro, pronto dio un paso atrás para tratar de incidir por las bandas con velocidad y centros laterales. Soko le ofreció uno a Kevin Carlos al que no llegó y también lo busco Marc Mateu tras un robo.
Lo acabó encontrando Kento, jugador que sería positivo que entrase más en juego. El japonés levantó la cabeza y donde fue su mirada fue también el esférico, a la cabeza del canterano, que de espaldas a puerta no falló. Kevin Carlos, muestra de que está de dulce y de que es capaz de rematar en cualquier situación, lo siguió intentando y aún dispuso de una ocasión más a la media hora. Esta vez el que le cedió fue Ratiu.
La superioridad aérea local no solo se limitó al ariete. Se hizo patente también en el área de Andrés y en una falta botada por Mateu que Blasco envío alta. Enfrente, el Ibiza poco tuvo qué llevarse a la boca. Un disparo de Herrera que no fue entre los tres palos.
Los visitantes, que antes del descanso no habían encontrado la llave del candado azulgrana, lo intentaron forzar en unos primeros compases de la segunda parte en los que se mostraron más vivos con un tiro a puerta de Appin al que le faltó mordiente y un córner que no tuvo más consecuencias. El Huesca le vio las orejas al lobo y adelantó sus líneas.
El primer movimiento desde el banquillo, un poco antes de alcanzar la hora de partido, sirvió para refrescar la línea de ataque. Entraron Kante, Juan Carlos y Valentín, y se retiraron Kevin Carlos, Escriche y Soko. A continuación, Mateu se internó en el área, Sánchez López apreció mano de Goldar y señaló el penalti. El propio extremo valenciano tomó la responsabilidad de tirarlo y no falló.
El 2-0 dio fuerza a los locales. Se olía el 3-0 y se produjo. El 2-0 dio fuerza a los locales. Aunque al Ibiza se le anuló un gol por claro fuera de juego, se olía el 3-0. Se celebró en la que era la tercera ocasión de Kante, que remató de primeras un centro de Mateu. Antes, no había definido bien un mano a mano y se había tenido que conformar con un córner tras un gran pase de Juan Carlos. Con todo decidido, aún hubo tiempo para que Vilarrasa, acompañado de Sielva, tomase la alternativa como jugador del Huesca
El próximo domingo el Huesca repite en El Alcoraz para recibir a las 21.00 al Málaga, que este domingo cayó con el Albacete (1-2).
Ficha técnica
SD Huesca: Andrés, Ratiu, Blasco, Timor, Miguel, Soko (Valentín, 56), Tomeo (Sielva, 88), Kento, Mateu (Vilarrasa, 88), Escriche (Juan Carlos, 56), Kevin Carlos (Kante, 56).
UD Ibiza: Fuzato, Ze Carlos (Gálvez, 81), Juan Ibiza, Goldar, Javi Vázquez, Appin (Grima, 81), Álvaro (Castel, 61), Morante, Suleiman (Ekain, 67), Herrera y Poveda (Miki Villar, 67).
Goles: 1-0, min. 15: Kevin Carlos. 2-0, min. 60: Mateu. 3-0, min. 87: Kante.
Árbitro: Sánchez López (Comité Murciano). Mostró tarjeta amarilla a los locales Soko (5’), Juan Carlos (82’) y Blasco (90) y a los visitantes Javi Vázquez (74’) y Castel (90')
Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada de liga de Segunda División disputado en El Alcoraz ante 5.801 espectadores.
