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El Amorebieta, un rival al borde del precipicio, el próximo reto de la SD Huesca
Los azulgranas visitan el sábado en Lezama, la ciudad deportiva del Athletic, a un conjunto que de no ganar podría consumar su descenso a 1ª RFEF.
Tras el empate del sábado ante el Sporting (1-1), que acercó a los asturianos a dos puntos del descenso, la SD Huesca, sin grandes alicientes en la tabla, afronta ahora otros dos enfrentamientos con rivales metidos de lleno en la pelea por la permanencia, el Amorebieta y la Real Sociedad B. En el caso de los primeros, de no ganar, este próximo fin de semana podrían unirse al Alcorcón y al Fuenlabrada como conjunto de 1ª RFEF después de que su última derrota con el Almería (3-0) les dejase a cinco puntos de la línea roja con nueve por disputarse.
El choque, programado el sábado a las 14.00, supondrá para el Huesca su regreso en partido oficial a las instalaciones de Lezama siete temporadas después, aunque delante no tendrá al oponente acostumbrado. El primer equipo azulgrana conoce la ciudad deportiva del Athletic de haberse cruzado allí con el filial de los bilbaínos, pero ahora lo hará con un contrincante que para debutar en Segunda División, al no reunir las condiciones exigidas por La Liga, tuvo que dejar su estadio, Urritxe, para jugar de prestado.
A lo largo del curso ha actuado como local en el campo 2 de Lezama, con capacidad para algo más de 3.200 espectadores. Allí, aunque la afluencia de público no ha sido numerosa, ha intentado hacerse fuerte sumando 26 de sus 37 puntos. De hecho, si aún conserva opciones de salvación después de haber vivido siempre, salvo en la tercera jornada, en la zona de descenso es por su actual racha de tres victorias consecutivas con el Ibiza (3-1), el Mirandés (1-0) y el Fuenlabrada (2-1).
Su directiva, con el fin de generar el mejor ambiente posible, decidió este lunes replicar las medidas que ya tomó en el cruce con el Fuenlabrada. Los socios tendrán dos invitaciones y habrá autobús gratis. Hace dos semanas contaron con 1.066 espectadores.
En la primera vuelta el marcador en El Alcoraz fue de 1-1 en el que era el estreno de Xisco y en las dos visitas que el Huesca ha realizado al Amorebieta, ambas en Segunda B y en Urritxe, se registró un 1-2 en la 2013-14 y un 2-1 un curso después.
Después de que empezase el ejercicio como responsable del banquillo Íñigo Vélez de Mendizabal, su técnico en las tres campañas anteriores, tras la jornada 30 le cogió el testigo Aritz Mújika. En sus filas hay un ex del Huesca, el portero Roberto Santamaría, que llegó a jugar en veinte partidos durante el debut en Primera División.
