Andrés Fernández: “Si algo bueno tiene la SD Huesca es el vestuario”

Andrés Fernández es uno de los veteranos del equipo, el segundo en edad por detrás de Mikel Rico, y presenta galones para ser referente dentro y fuera del terreno de juego. El portero, de 34 años, ha comenzado el campeonato como titular en la SD Huesca y anticipa un año feliz con el asidero de una plantilla que se está integrando con eficacia al modo de trabajar del técnico Nacho Ambriz. El triunfo inicial ante el Eibar (2-0) es, a juicio del guardameta, un punto de partida y no debe llevar a conclusiones precipitadas. En su segunda etapa en el club azulgrana, el murciano es también uno de los rostros emblema para una afición que empezó a regresar a las gradas.

Andrés entiende que se está trabajando “sobre unas buenas bases. Durante la pretemporada se han trabajado mucho algunos conceptos que quiere el míster. El partido ante el Eibar, sobre todo en la primera, mostró eso. Estamos contentos con la victoria pero esto es muy largo y todavía queda mucho”. Insistía el portero en que “Ambriz es muy concienzudo, quiere que el equipo sea protagonista con el balón y esa es la idea. Además, la gente que ha llegado nueva, con pocos entrenamientos, se comportó de una manera impresionante y a partir de ahí tenemos que crecer”.

En su comparecencia ante los medios informativos después del entrenamiento de este martes, el cancerbero ha corroborado esa llamada a la calma lanzada por el propio Ambriz: “Por supuesto. Comparto eso, es el primer partido y se ha de ir día a día. Por ganar un partido no se asciende y hay que seguir. Tenemos que trabajar igual en todos los entrenamientos, asumir los conceptos y afrontar así el partido de cada semana”. Andrés no quiere priorizar lo individual sobre el colectivo, prefiere señalar que “a nivel individual estuvimos todos bastante bien y lo importante es que el Huesca consiga victorias y la gente ponga lo mejor de sí en pos de ese objetivo”.

De forma muy gráfica, el murciano ve un vestuario “cojonudo”, con futbolistas que han llegado “con muchas ganas, jóvenes y extranjeros que quieren integrarse cuanto antes. Si algo bueno tiene el Huesca es el vestuario y al final intentamos ser una familia”. Se trata de un club, que en su definición, “viene de donde viene y es un club que intenta hacer las cosas bien. Intentamos jugar al balón y eso para el jugador es llamativo. Muchos vienen con la idea de hacer una buena temporada aquí para luego dar el salto”.

Andrés espera una temporada en la que “disfrutemos todos. Venimos de un año en el que, aparte del descenso, mucha gente lo ha pasado mal con la pandemia y tenemos que disfrutar. El otro día fue maravilloso volver a ver aficionados en el estadio, a los jugadores se nos notaba con un brillo diferente en los ojos y esa es la pasión que mueve el fútbol. Es lo que pido, disfrutar”. La grada empujó en los peores momentos para “estar todos unidos, club, afición y jugadores, para que todo salga bien”. El meta cuenta ahora con la sana rivalidad para el puesto de Miguel San Román, “un chaval majísimo al que se ve con ganas desde el primer día”.

La SD Huesca recibe este domingo en El Alcoraz (22.00, Movistar LaLiga) a un Cartagena que este lunes cayó en su estadio ante el Almería (1-3) y que “se ha reforzado bastante bien, es un equipo compacto. Sus errores le condicionaron mucho pero va a ser un equipo competitivo. Debemos estar preparados porque será un encuentro difícil”. Los azulgranas han completado este martes la segunda sesión de la semana con Borja García ya integrado en la dinámica de grupo y Siovas e Insua al margen. El miércoles aterrizará en Madrid el delantero paraguayo Isidro Pitta, al que se espera en el entrenamiento del jueves en El Alcoraz.