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El extremo, un puesto con muchas vacantes en la SD Huesca

Los azulgranas solo tienen confirmado un nombre para cubrir el ataque desde las bandas, David Ferreiro. También cuenta con contrato Joaquín Muñoz, pero su continuidad no es segura.

Partido SD Huesca Las Palmas / 02-07-2020 / Foto Rafael Gobantes [[[FOTOGRAFOS]]]
David Ferreiro, protagonista en la victoria ante la UD Las Palmas.
Rafael Gobantes

En la portería se tienen atados a Álvaro y Valera, en la defensa siguen Insua, Pulido, Luisinho y Galán, en la medular se cuenta con Mikel Rico, Nwakali, Mosquera, Juan Carlos y Eugeni, y en la punta del ataque ha renovado a Okazaki y también debe continuar Rafa Mir, salvo que el Wolverhampton, club propietario de sus derechos, diga lo contrario. Para los extremos, sin embargo, por el momento solo es segura la presencia de David Ferreiro, lo que de cara al regreso a Primera División convierte esa demarcación en una de las que más va a tener que reforzar la SD Huesca a partir del martes, día en que queda abierto oficialmente el mercado de verano.

Si bien es cierto que además del ‘7’ ahora mismo tiene contrato en vigor otro extremo puro, Joaquín Muñoz, su presencia en el vestuario final no está garantizada. Después de haber permanecido cedido desde enero en el Mirandés, el club quiere verle en acción durante la pretemporada antes de valorar el siguiente paso a seguir con un joven valor al que se incorporó el verano pasado desde el Atlético de Madrid y cuya vinculación se extiende hasta junio de 2023.

Así pues, de las decena incorporaciones que en el seno de la SD Huesca se estima que serán necesarias abordar, al menos tres tendrán que ser capaces de cubrir las posiciones adelantadas de banda. No en vano, la intención es la de alcanzar las 25 fichas, lo que unido a que en la próxima liga seguirá vigente la posibilidad de hacer cinco cambios por partido, hace que se vea como aconsejable poder doblar cada puesto más allá de que la polivalencia sea uno de los parámetros que más se valore desde la dirección deportiva.

Entre los nombres que se han empezado a relacionar con los azulgranas ya ha aparecido algún extremo. Tales son los casos de Kubo e Iván Sánchez. El japonés pertenece al Real Madrid y el Osasuna parece bien posicionado para conseguirlo y el andaluz del Elche es una de las piezas más codiciadas de la Segunda División. En la entidad altoaragonesa no se niega que figura en su agenda, si bien también se apunta que su contratación no es una prioridad. Igualmente existe interés en volver a contar con Jordi Mboula, cuya cesión desde Mónaco incluía tanto la opción de reeditarla como la de adquirir sus derechos.

A lo largo de la última temporada, descontando a Gallar, que solo participó en la primera jornada, además de con Ferreiro, Míchel ha contado con otros cuatro atacantes específicos para las alas. Al inicio del campeonato en el equipo se podía encontrar a Raba, Ivi y Joaquín Muñoz. Durante el mercado de invierno los dos últimos marcharon ante la falta de oportunidades y para cubrir sus huecos llegó Mboula, que, tras haber superado una lesión tuvo que ponerse a tono, por lo que, a excepción de su debut frente al Extremadura, se mantuvo inédito antes del parón. Tras él ganó en protagonismo.

Junto a ellos, aunque no fuese su demarcación natural, también desempeñaron esa labor de extremo varios jugadores más. Especial fue el caso de Sergio Gómez que, presentado como mediapunta, acabó siendo reconvertido para jugar tanto por la derecha como por la izquierda. Otros que cumplieron esas funciones fueron Escriche, Cristo y Rafa Mir e incluso Javi Galán recordó viejos tiempos. El lateral zurdo extremeño dio sus primeros pasos en el fútbol profesional como centrocampista ofensivo y no fue hasta poco antes de su entrada en el Huesca cuando pasó a ser defensa.

Toro quiere seguir en Portugal

Entre los jugadores que tiene en propiedad la SD Huesca y que pueden ser alineados en el extremo figura también el mediapunta Jonathan Toro, cedido la temporada pasada al Tondela de la primera división portuguesa y al que aún le resta un año de contrato con los azulgranas. El hondureño de 23 años, que ha desarrollado la mayor parte de su carrera deportiva en el país vecino, ha manifestado públicamente que su intención es continuar allí, donde le queda poco tiempo para poder conseguir el pasaporte luso y por tanto no ocupar plaza de extracomunitario, y de hecho en el préstamo articulado el verano pasado, el tercero desde su llegada a El Alcoraz en 2018, se habilitó una opción de compra. Internacional absoluto con su país desde el septiembre del año pasado, en la temporada de su debut en la máxima categoría ha marcado un gol, repartido tres asistencias y jugado en 32 partidos.

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