SD Huesca

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La SD Huesca vuelve al fortín de El Alcoraz para recibir a la Ponferradina

Los azulgranas recuperan a Pulido, Álvaro y Sergio Gómez, pero no podrán contar con Raba.

Jorge Pulido golpea el balón durante el entrenamiento del viernes.
Rafael Gobantes

En El Alcoraz, 19 puntos sumados, seis victorias, un empate, solo una derrota, trece goles a favor y cuatro en contra. Los difícilmente mejorables números de la SD Huesca como local se ponen a prueba esta sábado a partir de las 20.00 con la visita de la Ponferradina, un conjunto en racha tras siete jornadas sin perder que solo en dos ocasiones hasta el momento se ha quedado sin marcar y que resulta altamente complicado de abatir como demuestran las ocho tablas que aparecen en su haber.

Los azulgranas, dentro de una temporada marcada por la dicotomía que representan sus resultados como locales y visitantes, regresan al calor del hogar tras ceder la semana pasada la segunda posición a favor del Fuenlabrada, conjunto que les derrotó por 3-2 y que como su próximo rival puede presumir de ser un recién ascendido de rápida adaptación a la Segunda División. La pesadilla que se está convirtiendo para los de Míchel Sánchez el hecho de subirse al autobús contrasta con los dulces y evocadores sueños que les produce actuar ante su afición. Jugar en su campo les da confianza y seguridad, algo que irradian desde el pitido inicial. El técnico insiste en que a la hora de preparar los encuentros no se hacen distingos acerca de la ubicación del mismo, pero lo cierto es que los marcadores sí lo están reflejando.

Tras 16 jornadas, los altoaragoneses marchan cuartos con 26 puntos y el orgullo que permite poder decir que solo en dos ocasiones se han visto fuera de los seis primeros puestos, una de ellas en el pistoletazo de salida de la competición, por lo que se puede considerar como anecdótica. A diferencia de la mayoría de sus rivales directos, no han tenido una gran racha, la mejor no sobrepasa los tres partidos seguidos sin perder, pero sí que el rendimiento está resultando sostenido en el tiempo; su peor momento se vivió con los dos tropiezos consecutivos frente al Numancia y al Albacete.

Ahora, la victoria les podría aupar de nuevo hasta el segundo puesto toda vez que los dos conjuntos que le preceden se cruzan con contrincantes que miran con ansias a la zona alta. El Fuenlabrada visita al Girona, octavo, y el Almería se ve las caras con el Numancia, tercero contra quinto. Del mismo modo, una mala tarde podría hacer que pierdan el paso. No en vano, la mitad superior de la clasificación se encuentra muy comprimida y entre la tercera y la undécima plaza hay tres puntos de diferencia.

Míchel cuenta con prácticamente todos sus efectivos en orden de revista. Con Doukouré convertido en un fijo en la lista de bajas ante sus problemas de rodilla, la única duda era la de Raba, que finalmente se ha resuelto de forma negativa. El cántabro, que en Fuenlabrada tuvo que retirarse del campo por una lumbalgia y que a principios de semana sufrió una gastroenteritis, después de que el jueves se probase sobre el césped del Pirámide, ayer en el último entrenamiento previo al duelo con la Ponferradina se limitó a observar a sus compañeros desde la banda. Tampoco entrará en la convocatoria Ivi López, recuperado de su lesión en el sóleo, pero con apenas bagaje ejercitándose con el grupo.

En el once habrá cambios con respecto al dispuesto en el Fernando Torres. Uno de los más claros es el de la portería. Álvaro Fernández, tras su estancia con la selección española sub 21, volverá a situarse bajo los palos en detrimento de Yáñez. También regresará al centro de la zaga Pulido, ausente en Fuenlabrada por primera vez este curso por unos problemas físicos, y existe la duda de quién le acompañará con Sá, Datkovic e Insua disponibles.

El portugués fue su pareja entre las jornadas cuatro y doce, el croata le cogió el testigo durante los cuatro encuentros siguientes y ambos confluyeron hace ahora siete días saldando una actuación poco convincente. El tercero en discordia, tras recuperarse de una rotura de ligamentos en la rodilla izquierda y de una lesión muscular posterior en la pierna derecha, es una pieza considerada importante por Míchel que espera su oportunidad.

En la defensa surge otra incógnita en el lateral izquierdo. Galán parecía haberse asentado como opción preferente para ese emplazamiento, pero contra el Fuenlabrada se optó por Luisinho.

Más arriba, está vacante el hueco dejado por Raba en el extremo diestro. En su anterior ausencia, que comprendió siete encuentros a causa de una lesión en el hombro derecho, el encargado de cubrirle satisfactoriamente fue Sergio Gómez, que también se ha reincorporado tras su estancia con España sub 21. Sin embargo, no se pueden descartar otros nombres como el de Cristo, autor de los dos goles en el Fernando Torres, y el de Ferreiro, que volvió a ser de la partida en ese escenario.

Enfrente, la Ponferradina, dirigida por Jon Pérez Bolo, y que marcha novena, espera poder repetir una actuación como la que firmó en su visita al Rayo Vallecano en la que con un 1-3 consiguió su único triunfo a domicilio hasta la fecha. Los del Bierzo continúan teniendo como principal reclamo al brasileño Yuri, que a sus 37 años ya ha logrado ocho dianas este ejercicio. Además, en sus filas figura el aragonés Sergio Buenacasa, que debutó en el empate a uno del domingo pasado con el Girona. La única duda en su alineación se sitúa en el eje de la defensa con Yac, tras haber estado concentrado con Níger, y Trigueros como opciones.