El plan de Míchel se atasca

Míchel Sánchez parecía haber dado con la tecla, pero el tono de ésta se ha desafinando. Tras un arranque de campaña con constantes rotaciones en el once inicial, el técnico de la SD Huesca ha optado en cuatro de sus últimos cinco compromisos por dar continuidad a un bloque de jugadores. La apuesta comenzó siendo exitosa, pero ha decaído hasta el punto de que los azulgranas protagonizaron el pasado sábado en la derrota ante el Lugo uno de sus partidos más irregulares del curso (3-2). Dejando al margen la visita al Cádiz, que contó con novedades como el uso de Galán como extremo desde el primer minuto, contra el Girona, el Málaga, el Racing y en el Anxo Carro prácticamente han sido los mismos futbolistas los que han posado en la foto inicial de cada duelo. El resultado, siete puntos de doce posibles, dos victorias, un empate in extremis y un tropiezo.

El grupo de elegidos lo componen Álvaro en al portería, Miguelón en el lateral derecho, Luisinho en el izquierdo, Josué Sá y Pulido en el eje de la zaga, Mosquera, Rico y Juan Carlos en la medular, Sergio Gómez y Ferreiro en los extremos y Okazaki en la punta de ataque. De ellos, nueve han sido de la partida en los últimos tres enfrentamientos. Luisinho no pudo estar presente ante el Málaga por sanción y Álvaro se perdió el cruce con el Racing debido a su convocatoria con España sub 21.

Su carta de presentación no pudo estar escrita con mejor caligrafía, el 1-0 contra el Girona, uno de los pesos pesados de la categoría. Tras la derrota posterior en tierras gaditanas, la tendencia marcada en El Alcoraz con los catalanes continuó de inicio frente al Málaga. La primera parte se cerró con un 2-0, que acabaría siendo definitivo, después Ferreiro falló un penalti y, aunque los oscenses acabaron jugando con uno más, se echaron atrás.

Una semana después, el careo rugoso y feo que planteó el Racing cerca estuvo de costar un disgusto. Los cántabros, que se adelantaron en el minuto 68, mostraron su maestría en el arte de perder el tiempo y tuvo que ser Ivi, que salió desde el banquillo, el que rescatase un punto en el descuento (1-1).

La tendencia a la baja acabó por confirmarse en Lugo. Enfrente había un rival metido en la zona de descenso y con dudas al que le bastó con estar ordenado y aprovechar sus ocasiones para llevarse los tres puntos (3-2). El Huesca, que fue capaz de equilibrar un 2-0, solo pudo mostrarse realmente superior a los gallegos con superioridad numérica. En igualdad de condiciones, el parcial fue de 3-0.

En todos estos partidos el planteamiento inicial ha sido siempre el mismo, el que se viene aplicando, de hecho, desde el primer amistoso veraniego en Calahorra y en el que el técnico confía plenamente, un 4-3-3 que considera válido y adaptable para cualquier situación y rival. De esta manera logra llevar el peso del partido y con él el equipo ha conseguido mantenerse entre los seis primeros puestos, los que dan derecho a pensar en el ascenso, en diez de las doce jornadas que se llevan consumidas. Es decir, en más de un cuarto de la competición.

Entre los problemas detectados aparecen la falta de mordiente y las lagunas a balón parado. Algo que el propio Míchel crítico en Lugo abiertamente: «No hemos sido contundentes en las áreas».

Ante esto, de cara al recibimiento al Elche del próximo domingo (18.00) podrían producirse novedades. Una será obligada. Josué Sá presumiblemente será sancionado tras su expulsión en el Anxo Carro y para cubrir su hueco opositan Datkovic e Insua. Además, Raba, jugador clave en el inicio del curso, ya está disponible tras su lesión en el hombro y de hecho entró en la última convocatoria por primera vez en seis jornadas. Otro que podría regresar al césped es Eugeni, que en los últimos compromisos ha perdido protagonismo. Además, se espera que pueda estar en condiciones de tener minutos Escriche, en función de cómo evolucionen sus problemas de rodilla.