real zaragoza
El fichaje de Roberto Fernández se le tuerce al Real Zaragoza
El club aragonés está cerca de perder otro objetivo principal de su mercado al preferir el goleador del Málaga la opción de firmar en el Sporting de Braga sobre la cesión al Zaragoza vía Atlético de Madrid
Roberto Fernández, objetivo principal del Zaragoza para reforzar su delantera, se aleja del equipo aragonés. Otra pieza señalada en rojo que se le tuerce al proyecto de Víctor Fernández. Si una oferta de última hora no interviene en las negociaciones, el goleador del Málaga tiene todo perfilado para marcharse al Sporting de Braga, destino que ha convencido más al futbolista que la opción de irse cedido al Zaragoza vía traspaso al Atlético de Madrid. La operación está ya esbozada a falta de que el club portugués y el Málaga acuerden el precio final: 1,5 millones de euros de fijo, aunque aún hay diferencias sobre las variables y derechos futuros, que dejarán el traspaso en torno a los 3 millones de euros. El Atlético podría haber levantado esa propuesta económica, pero el jugador aparcó esta vía del club colchonero al enterarse de la intención y la prioridad de mandarlo cedido una temporada al Real Zaragoza, tal y como informó anoche Radio Marca Málaga. En una reunión celebrada ayer en La Rosaleda entre los agentes del jugador y los dirigentes malagueños, la opciones del Atlético y del Zaragoza quedaron casi enterradas y cogió velocidad la del Sporting de Braga.
Hace unos días, tal y como avanzó este diario ayer, el Real Zaragoza, a través de Juan Carlos Cordero y el consejero Mariano Aguilar, con el visto bueno de Víctor Fernández, iniciaron gestiones formales para posicionar al club aragonés en el fichaje de Roberto, de 22 años, por quien el Atlético de Madrid había abierto una negociación. En esas conversaciones, antes del ascenso del Málaga, el club andaluz había solicitado incluir un año de cesión en el traspaso si el equipo retornaba a la categoría de plata, como así ha sido. Pero el plan A del Atlético y la razón principal de la operación era fichar a Roberto como jugador de su filial para cederlo al Zaragoza. El jugador conocía este interés aragonés, pero no terminó de convencerle, de ahí que la opción del Sporting de Braga cogiera ventaja. También el Río Ave portugués ofertó algo más de dos millones de euros por él.
La operación se encuadraba dentro del marco de colaboración y sinergias con el Atlético explotado ya en temporadas previas con jugadores como Santiago Mouriño o Giuliano Simeone. Pero las posibilidades del Zaragoza pasaban por dos claves: la compra de Roberto por parte del Atlético y que, en ese acuerdo, no se incluyera una opción preferente para que el jugador se quede en el Málaga, tal y como era el deseo del club andaluz. Si no se hubiera producido ese ascenso -agónico, en los minutos finales de la eliminatoria contra el Nástic-, la ‘operación Roberto’ en dirección Zaragoza quizá hubiera tenido otro desenlace.
A Roberto Fernández le queda un año más de contrato en el Málaga, hasta el 30 de junio de 2025, y con el ascenso su cláusula de rescisión ha subido de 6 a 10 millones de euros. La entidad de la Costa del Sol ha querido renovarle, pero era complicado: las propuestas recibidas por Roberto en las últimas semanas le multiplican el sueldo, elevándolo por encima del millón de euros, fuera del alcance del Málaga, necesitado además de vender a algún jugador para tener un margen salarial competitivo, y era Roberto la pieza más jugosa de su mercado, más aún cuando, con solo un año de contrato por delante, su venta este verano sea la única vía posible para no perderlo gratis y conseguir ingresar un traspaso. Su fuerza negociadora, en este sentido, es muy escasa.
Roberto Fernández cumple hoy 22 años, es de la generación de 2002, y se formó en las categorías inferiores del Córdoba y del Sevilla. Con 16 años, lo fichó el Málaga, y a los 19 debutó en su primer equipo, en Segunda División, categoría en la que jugó 32 partidos hace tres cursos y marcó dos goles, en una temporada complicada para los malagueños, que se salvaron del descenso en el tramo final. El Málaga, después, decidió cederlo al filial del FC Barcelona, donde dio un paso más en su progresión, marcando 7 goles en 36 partidos. Regresó a su club matriz, para jugar de nuevo en Primera RFEF, donde se ha destapado este pasado curso con 15 goles en la liga regular y 5 en la promoción de ascenso. Estos cinco goles ha sido decisivos para el ascenso del Málaga y la confirmación de Roberto como goleador.
Es un delantero muy completo, con una gama de registros muy variada. Su fuerte constitución y su 1,86 le permiten destacar en el juego aéreo y en los apoyos. Es un punta que no solo se impone en el área, sino que también tiene capacidad para relacionarse con el juego y atacar espacios gracias a su potencia y coordinación en carrera.
